Muchos problemas posturales comunes pueden contribuir a las condiciones de trabajo, que promueven estar constantemente sentado y encorvado, ejercicio inadecuado y hábitos de sueño. Estos no definen completamente las causas de todos los problemas de postura, pero son la fuerza impulsora de muchos problemas de espalda y columna. Una postura de hombros redondeados o cuello hacia adelante son tipos comunes de problemas de postura, cada uno de los cuales significa que la columna está fuera de equilibrio. Se puede mejorar la postura conscientemente recordando sentarse derecho, o se puede lograr gradualmente a través de varios ejercicios que incorporan estiramiento y aumento de la flexibilidad.
Los hombros redondeados generalmente se desarrollan a partir de malos hábitos de postura al sentarse frente a una computadora o trabajar en un escritorio. Cuando los hombros tienen una apariencia redondeada y no están hacia abajo y hacia atrás como en la postura normal, puede crear problemas al estresar la parte superior de la espalda y los órganos internos. La ruptura consciente del hábito es el mejor método para invertir gradualmente la postura del hombro redondeado. También ayudará a curar cualquier molestia o dolor en el cuerpo asociado con los problemas de postura.
Cuando el cuello o la cabeza sobresalen hacia adelante, como en la postura del cuello hacia adelante, esto significa que los hábitos posturales no son necesariamente malos, sino que carecen de fuerza. La cabeza que continúa empujando hacia adelante puede promover problemas dentro del cuerpo asociados con diferentes órganos, como los intestinos, y también puede aumentar el peso y la tensión del cuello, creando dolor y molestias. Se pueden desarrollar otros problemas de postura como resultado de la postura del cuello hacia adelante, como encorvarse mientras está sentado y de pie. Suele producirse presión sobre los discos de la columna vertebral, así como un aumento de la presión sobre los órganos abdominales.
Los ejercicios para mejorar estos problemas posturales trabajan en la creación de fuerza y flexibilidad dentro de la columna para apoyar la espalda en una posición erguida adecuada. Los movimientos simples de hombros en sentido antihorario y viceversa son los ejercicios comunes para comenzar a aflojar la parte superior de la espalda y crear flexibilidad en los músculos del hombro. Este ejercicio es un componente importante para ayudar a aliviar la tensión en quienes padecen la postura del cuello hacia adelante. También prepara el cuerpo para mover la columna y fortalecer la espalda.
Las posturas de yoga como el perro mirando hacia arriba ayudan a enderezar la columna, especialmente en aquellos que sufren de espaldas redondeadas debido a malos hábitos posturales. Esta postura implica empujar las palmas de las manos hacia el suelo mientras se dobla la columna hacia atrás tanto como sea posible. Esta postura no solo ayuda a aliviar el dolor de espalda y a aumentar la flexibilidad de la columna, sino que también ayuda a mejorar la postura al entrenar la columna para que vuelva a caer en su curvatura natural. Los problemas de postura pueden convertirse en problemas permanentes, pero pueden ser reversibles con dirección y estiramientos conscientes.