La meditación de los chakras es un enfoque curativo que busca realinear el aura del cuerpo mediante el empleo de métodos básicos de centrado y conexión a tierra comunes a todo tipo de meditación. El método se enfoca en considerar cada uno de los siete chakras principales durante el curso de la meditación, ayudando a equilibrar cada una de estas luces o partes del aura entre sí. Los defensores de este tipo de meditación entienden el enfoque para ayudar al cuerpo y la mente a hacer uso tanto de los recursos inherentes al cuerpo como de la energía luminosa que lo rodea para lograr la curación.
Para las personas que nunca antes han intentado la meditación de los chakras, es una buena idea aprender el proceso de la meditación curativa bajo el cuidado de un maestro o instructor. La meditación guiada puede tener lugar en un entorno grupal o incluir instrucción individualizada con el maestro. Si bien algunos de los conceptos básicos son familiares para las personas que han practicado otras formas de meditación, las aplicaciones pueden ser algo diferentes.
Una parte importante de la meditación de los chakras es aprender a aterrizar durante el proceso de meditación. Casi cualquier tipo de instrucción de meditación abordará este elemento clave, proporcionando a los estudiantes ideas sobre cómo despejar la mente, respirar adecuadamente y alejarse de las ansiedades del día a día y cualquier otra cosa que pueda amenazar la serenidad lograda durante el período de meditación. A veces, la conexión a tierra se presenta como una reconexión con la naturaleza; algunos maestros incluso usan imágenes como hacer que los estudiantes imaginen que están extendiendo una raíz desde el cuerpo hacia la rica energía del suelo de la tierra.
Junto con la conexión a tierra, el centrarse también es clave para la preparación para la meditación de los chakras. Centrarse implica relajar tanto el cuerpo como la mente. La respiración suele ser útil como parte de las técnicas de meditación que se utilizan para centrarse, así como para mantener la conexión durante el curso de la sesión de meditación. Una vez que el individuo se ha desconectado con éxito de los cuidados y preocupaciones, es posible comenzar el proceso de meditación de los chakras.
Hay varias formas de proceder con la meditación del chakra. Un enfoque a veces se llama dibujo en colores. Con este enfoque, el individuo usa el ojo de la mente para ver los siete chakras principales que componen el aura del cuerpo. Si uno de los colores parece pálido o disminuido de alguna manera, la meditación se enfoca en extraer energía del entorno circundante, como la tierra o el sol, para restaurar el color a su tono y estabilidad adecuados. A medida que el aura se vuelve completa una vez más, el desequilibrio se corrige y la anticipación es que el cuerpo y la mente comenzarán a sanar.
Otro enfoque implica invocar mantras específicos para cada uno de los siete chakras principales. Este enfoque se utiliza a menudo cuando existe una gran cantidad de estrés físico o emocional. Cada chakra se considera a su vez, y el mantra ayuda a guiar a la persona que medita hacia una unión más estrecha con la energía que compone el chakra. A medida que se logra la unidad, el chakra se fortalece y se restablece el equilibrio.