El síndrome de Habba es una diarrea crónica debilitante causada por una vesícula biliar disfuncional. Lleva el nombre del Dr. Saad Habba, cuyo estudio sobre la diarrea crónica por disfunción de la vesícula biliar se publicó en la edición de agosto de 2000 del American Journal of Gastroenterology. Su estudio sugiere que una vesícula biliar disfuncional que llena el tracto digestivo con bilis excesiva estimula el colon para liberar rápida y frecuentemente el contenido intestinal.
Normalmente, la vesícula biliar almacena bilis que ha sido producida por el hígado. La vesícula biliar secreta la bilis en los intestinos para digerir las grasas. Muy poca o demasiada bilis provoca diversos problemas digestivos, que son más o menos graves según la constitución del paciente. Los cálculos biliares, los conductos biliares bloqueados o la inflamación inhiben la función normal de la vesícula biliar. El síndrome de Habbas se produce cuando la vesícula biliar disfuncional produce un exceso de bilis, lo que provoca diarrea crónica.
La diarrea crónica es un trastorno vergonzoso y debilitante para millones de personas. También puede provocar fatiga extrema y mala salud debido a la incapacidad del intestino para absorber los nutrientes adecuados de la dieta. Varios pacientes se acercaron al Dr. Habba que se quejaban de diarrea crónica inmediatamente después de las comidas. Originalmente diagnosticados y tratados por el síndrome del intestino irritable (SII), estos pacientes experimentaron poca o ninguna mejoría en su condición.
El Dr. Habba realizó estudios en varios pacientes, tomando nota de las enfermedades comunes que los aquejaban: diarrea crónica después de las comidas, miedo a salir de casa por miedo a la incontinencia intestinal, falta de mejora con la terapia estándar del SII y pruebas radiológicas que revelan disfunción de la vesícula biliar. El Dr. Habba notó que, a diferencia de los pacientes con SII, estos pacientes no experimentaron dolor intestinal ni calambres intestinales, solo diarrea urgente y, a veces, explosiva.
Habba recetó colestiramina, un fármaco que se distribuye a los pacientes después de la extirpación de la vesícula biliar. Sus pacientes experimentaron un alivio inmediato. El Dr. Habba formuló una teoría según la cual los pacientes con vesículas biliares intactas pero disfuncionales sufrían de esta diarrea crónica, a la que llamó síndrome de Habba. Los agentes aglutinantes de ácidos biliares como la colestiramina, el colesevelam y el colestipol se unen a la bilis de la vesícula biliar en el tracto intestinal, evitando la reabsorción. Las personas que padecen el síndrome de Habba y se someten a la terapia con medicamentos han mostrado una mejoría casi de inmediato.
Según el Dr. Habba, más del 40 por ciento de los pacientes en su estudio que habían sido diagnosticados con IBS sufren del síndrome de Habba. En 2011, el síndrome de Habba era una teoría médica que requería más estudios. Sin embargo, quienes padecen diarrea crónica por disfunción de la vesícula biliar han encontrado alivio con agentes aglutinantes de ácidos biliares y han ganado la capacidad de funcionar en la vida una vez más.