¿Qué es la glositis?

La glositis es una afección inofensiva que resulta de la inflamación de la lengua. La irritación aguda o crónica hace que la lengua se vuelva suave, se ponga roja oscura y se hinche. Algunas personas heredan la afección de sus padres, pero la mayoría de los casos de glositis son causados ​​por varios factores ambientales. Un dentista puede ayudar a los pacientes a encontrar alivio de los síntomas identificando y tratando las causas subyacentes. Mantener una dieta nutritiva y buenas prácticas de higiene bucal puede ayudar a prevenir la reaparición de los problemas de la lengua.

Una lengua sana está cubierta de pequeñas protuberancias y proyecciones similares a pelos llamadas papilas que contienen las papilas gustativas y ayudan a tragar los alimentos. La inflamación y la hinchazón de la lengua provocan la desaparición de las papilas y la lengua adquiere una apariencia suave, incluso brillante. La glositis puede ser causada por infecciones bacterianas y virales, reacciones alérgicas a productos de higiene bucal y deficiencias de vitamina B o hierro. La lengua también puede estar irritada por una quemadura grave, el consumo de tabaco, el alcohol y las comidas picantes.

A medida que la lengua se hincha, por lo general se vuelve de un tono rojo oscuro y se vuelve sensible. Algunos casos de glositis, especialmente los causados ​​por infecciones, resultan en una constante y dolorosa sensación de ardor en la lengua. Una condición llamada lengua geográfica ocurre cuando solo una parte de la lengua se ve afectada por la inflamación, lo que resulta en una apariencia distinta, similar a un mapa, de parches de colores claros y oscuros. La hinchazón puede ser lo suficientemente grave como para dificultar el habla y la deglución, y algunas personas enfrentan problemas respiratorios cuando la lengua agrandada bloquea las vías respiratorias.

La irritación de la lengua que causa decoloración e hinchazón debe ser inspeccionada por un dentista para garantizar un diagnóstico preciso. Se debe determinar la causa subyacente de los síntomas para garantizar que los pacientes reciban un tratamiento eficaz. Un dentista puede inspeccionar cuidadosamente la lengua e intentar identificar la causa de la glositis. Si las razones de la inflamación de la lengua no están claras, se puede derivar al paciente a un médico para que le realicen análisis de sangre y tejidos.

Los pacientes a menudo reciben medicamentos antiinflamatorios para aliviar los síntomas inmediatos de dolor e hinchazón. La glositis causada por alimentos calientes, alcohol o consumo de tabaco generalmente se puede aliviar simplemente evitando los irritantes. Las quemaduras y las lesiones directas tienden a curarse por sí solas en unos pocos días sin atención médica directa, y la mayoría de las infecciones se pueden tratar con antibióticos orales. En el caso de una deficiencia de vitaminas, un médico puede sugerir que un paciente tome suplementos y realice cambios en la dieta. Independientemente de la causa de la glositis, es importante practicar una buena higiene bucal y programar chequeos dentales regulares para prevenir futuros problemas en la boca y la lengua.