¿Qué es el chantaje emocional?

El chantaje emocional es una forma de manipulación psicológica en la que una persona intenta coaccionar a otra para que haga lo que quiere mediante el uso de amenazas emocionales y la creación de una culpa inmerecida. Las personas suelen cometer un chantaje emocional al amenazar con hacerse daño a sí mismas, a su víctima oa otra persona si la víctima no les brinda el tipo de atención que desean. Un chantajista emocional también puede simplemente demostrar emociones fuertes, aterradoras e inapropiadas si su víctima toma o considera una decisión que no le gusta al chantajista. Como resultado, la víctima del chantaje emocional a menudo cederá ante el chantajista para evitar sufrir un colapso emocional o sentirse responsable de las consecuencias que amenaza el chantajista.

En el curso de la mayoría de las relaciones, no es raro que una de las partes presione ocasionalmente los botones de la otra para obtener lo que quiere de esa persona. Muchos chantajistas emocionales llevan esta tendencia demasiado humana al extremo y la convierten en un sello distintivo de sus interacciones con los demás. En lugar de reconocer que sus necesidades y deseos no siempre coinciden con los de los demás y que la negociación y el compromiso son necesarios en las relaciones humanas saludables, practican el chantaje emocional en un intento de conseguir que los demás hagan lo que quieren. Una forma simple de chantaje emocional es el individuo que se enfurruña, se queja o se enfurece cuando no se sale con la suya. Su reacción es tan desagradable para su víctima que la víctima aceptará las demandas del chantajista para evitar tener que lidiar con su estado emocional tóxico.

A medida que continúa el abuso psicológico, el chantaje puede volverse más flagrante, y las amenazas de las consecuencias de la no sumisión se vuelven más graves. Por ejemplo, un chantajista emocional puede amenazar con suicidarse si su víctima se niega a quedarse en casa o ir a visitarlo de inmediato. Si el chantajista emocional tiene una adicción o un historial de comportamiento delictivo, puede amenazar con reanudar el abuso de sustancias u otros comportamientos negativos si su víctima se niega a aceptarlo o satisfacer sus necesidades. Algunos chantajistas emocionales son muy sofisticados y amenazarán a sus víctimas con consecuencias que ellos saben que encontrarán extremadamente dolorosas. Un chantajista emocional puede decirle a su víctima que iniciará rumores sobre ella o revelará un secreto familiar si ella no cumple con sus demandas.

Aquellos atrapados en un ciclo de chantaje emocional a menudo se benefician del asesoramiento y la psicoterapia. Un objetivo de este tratamiento debe ser capacitar a la víctima para que reconozca las señales de advertencia y las características verbales del chantaje emocional a fin de responder de manera adecuada. Las víctimas necesitan aprender formas de no quedar atrapadas en el ciclo del chantaje emocional y establecer límites con quienes las rodean.