¿Cuáles son las diferentes causas de la paranoia?

La paranoia es un sentimiento abrumador de miedo y sospecha que manipula los pensamientos y el comportamiento de una persona. Las causas de la paranoia pueden ser enfermedades mentales y físicas, así como medicamentos recetados e ilegales. Los tratamientos más comunes incluyen fármacos antipsicóticos o antidepresivos y psicoterapia.
Las enfermedades mentales más comunes que pueden producir paranoia son la esquizofrenia paranoide, el trastorno de personalidad paranoide y la enfermedad de Alzheimer. La esquizofrenia paranoide es una forma de enfermedad mental caracterizada por psicosis o dificultad para interpretar la realidad. La psicosis puede hacer que las personas malinterpreten las acciones de las personas que las rodean, produciendo pensamientos y comportamientos paranoicos. El trastorno de personalidad paranoica es una enfermedad psiquiátrica caracterizada por sentimientos continuos de sospecha y ansiedad. La enfermedad de Alzheimer es una forma progresiva de demencia que afecta la memoria y los procesos racionales del pensamiento y, a veces, los pacientes sienten y actúan muy desconfiados de sus cuidadores y familiares.

Otras causas de paranoia son la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Huntington, los accidentes cerebrovasculares y las lesiones cerebrales. La enfermedad de Parkinson es un trastorno neurológico que provoca movimientos y temblores descoordinados. El medicamento que se usa para tratar la enfermedad de Parkinson a veces causa pensamientos o comportamientos paranoicos, y cambiar de medicamento o manipular la dosis puede ayudar a controlar este efecto secundario. La enfermedad de Huntington es un trastorno neurológico degenerativo que puede producir paranoia a medida que el cerebro pierde la capacidad de razonar. Las causas raras incluyen derrames cerebrales y lesiones cerebrales, las cuales pueden producir períodos temporales o problemas duraderos de paranoia.

Varios medicamentos recetados, como el medicamento cimetidina para el reflujo ácido, el relajante muscular baclofeno, algunos corticosteroides, anfetaminas, antidepresivos y medicamentos utilizados para tratar el virus de la inmunodeficiencia humana, también pueden causar paranoia. En la mayoría de los casos en los que se manifiesta paranoia, la dosis del fármaco se puede modificar para controlar el efecto secundario paranoico o se puede sustituir por un fármaco diferente. Una de las causas más conocidas de paranoia es el uso de drogas ilegales 3,4 metilendioximetanfetamina o éxtasis, marihuana, dietilamida de ácido lisérgico (LSD), fenciclidina (PCP) y anfetaminas. La abstinencia de estos medicamentos también puede causar períodos difíciles de paranoia.

El tratamiento de la paranoia a menudo implica el uso de medicamentos antipsicóticos o antidepresivos. Cuando sea posible, se puede probar la psicoterapia para pacientes receptivos, pero el miedo abrumador y los pensamientos sospechosos de las personas paranoicas pueden impedir que esta forma de terapia funcione. A veces, la psicoterapia es posible después de que el paciente haya tomado medicamentos antipsicóticos o antidepresivos durante un período corto de tiempo. En casos más graves, la paranoia puede tratarse con terapia electroconvulsiva u hospitalización.