¿Cuáles son los síntomas del trastorno de personalidad múltiple?

El trastorno de personalidad múltiple, también conocido como trastorno de personalidad disociativo, es una enfermedad mental grave pero de alto perfil. El síntoma principal del trastorno de personalidad múltiple incluye el desarrollo en una persona de más de una personalidad distinta. La personalidad o personalidades pueden tener un control significativo sobre el comportamiento de una persona que vive con esta condición. Los síntomas secundarios pueden incluir depresión, psicosis y alucinaciones. Los trastornos del sueño y los cambios de humor también pueden acompañar al trastorno.

Los expertos en salud mental no están completamente seguros de qué causa el trastorno de personalidad múltiple, pero muchos creen que la afección tiene su origen en un trauma infantil. Un niño que experimenta un abuso particularmente traumático o prolongado, o que es testigo de violencia extrema, puede intentar olvidar o compartimentar la experiencia como un mecanismo de defensa. Si bien muchos sobrevivientes de abuso o trauma infantil nunca desarrollan personalidades múltiples, algunos se disocian tan profundamente que este trastorno puede desarrollarse.

Es importante señalar que las personalidades, también conocidas como alters, pueden tener una profundidad significativa. Una personalidad alternativa no es solo un cambio de humor o actitud. Por ejemplo, algunas personas con trastorno de personalidad múltiple no pueden recordar eventos importantes de la vida en uno o más de los alters, y esto no parece ser intencional o falso. Los alters pueden tener una letra diferente, diferentes gustos y preferencias y, lo que es más serio, pueden participar en comportamientos riesgosos, peligrosos o incluso delictivos que la otra personalidad principal no aprobaría. Estos síntomas pueden hacer que a las personas con el trastorno les resulte muy difícil tener un trabajo o mantener relaciones saludables.

Para muchas personas, los síntomas del trastorno de personalidad múltiple pueden ser la causa de un estrés significativo. Es posible que una persona con la afección no se reconozca en un espejo o se pregunte por qué otros la llaman por un nombre que ella no reconoce como propio. En algunos casos, los pacientes pueden experimentar apagones después de que sus personalidades cambian de una a otra y pueden encontrarse repentinamente en un entorno desconocido sin tener idea de cómo llegaron allí.

El tratamiento para el trastorno de personalidad múltiple varía según las necesidades del paciente y la gravedad de la afección. Los pacientes suelen participar en psicoterapia y pueden ser tratados con terapia de electrochoque o medicamentos psiquiátricos. Algunos terapeutas también usan la hipnosis, en parte para ayudar a descubrir y trabajar con personalidades alternativas y, en algunos casos, para descubrir un trauma reprimido.