¿Cuál es la diferencia entre marcas de piel y lunares?

Los acrocordones y los lunares son crecimientos de la piel, pero los acrocordones siempre son benignos y los lunares a veces preceden al desarrollo del melanoma. Por lo general, estos crecimientos no se tratan a menos que exista una razón urgente para hacerlo, como preocupaciones estéticas o preocupaciones de que un crecimiento se haya vuelto canceroso. Quizás la diferencia visible clave es que las etiquetas de piel tienden a sobresalir, mientras que los lunares son más planos, con un área de superficie elevada.

En el caso de las etiquetas cutáneas, el crecimiento consiste en un tumor benigno, generalmente cercano al color natural de la piel del paciente, que se desarrolla en forma de colgajo. Estos crecimientos pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, solos o en grupos. Los lunares son parches de piel más oscura que típicamente se vuelven ásperas y levantadas con el tiempo, a veces también desarrollan un cabello inusualmente largo. Algunos lunares son congénitos, mientras que otros aparecen más tarde en la vida, en contraste con las etiquetas cutáneas, que siempre se desarrollan a medida que las personas envejecen.

Tanto las marcas en la piel como los lunares pueden verse desagradables. Ambos también pueden ser removidos en un procedimiento de consultorio por un dermatólogo, siendo la criocirugía un método muy común para eliminar los crecimientos no deseados. En este procedimiento, se aplica una sonda de congelación al crecimiento, lo que hace que las células exploten y mueran. En unos pocos días, se desprenderán, dejando la piel limpia.

Por lo general, las personas solicitan la eliminación de las marcas de piel si las protuberancias atraen atención no deseada o causan problemas al engancharse en la ropa. En el caso de los lunares, un profesional médico puede recomendar su extracción y biopsia si cambia de color, textura o forma en un período de tiempo muy corto, ya que estos pueden ser signos de una malignidad. El profesional médico eliminará completamente el lunar al mismo tiempo que se toma una muestra de biopsia; si el crecimiento resulta ser maligno, ya se ha dado el primer paso en el tratamiento.

A veces, las marcas cutáneas y los lunares pueden parecer ambiguos, especialmente si una persona no ha notado un crecimiento antes. Un dermatólogo puede inspeccionar el sitio para determinar qué tipo de crecimiento está involucrado y hacer recomendaciones de tratamiento para abordar el problema. Se puede recomendar un enfoque de esperar y observar para ver si el crecimiento cambia antes de continuar con tratamientos agresivos. Las personas con antecedentes de cualquier tipo de crecimiento también deben tenerlo anotado en sus gráficos para que los nuevos proveedores de atención médica sepan que se han documentado y comentado.