La ciática y el dolor de cadera a menudo se asocian entre sí porque el nervio ciático corre desde la parte inferior de la espalda hasta cada pierna, lo que significa que el nervio pasa cerca de los músculos que están conectados a la cadera. Muy a menudo, los músculos de la cadera que se tensan o tensan pueden causar compresión en el nervio ciático, lo que puede provocar ciática. La ciática es una sensación dolorosa, a menudo un dolor punzante, que puede ir desde la parte baja de la espalda hasta la parte posterior de las piernas debido a la compresión del nervio ciático. Por lo tanto, la ciática también puede causar dolor de cadera.
Aunque están estrechamente relacionados, la ciática y el dolor de cadera no siempre van de la mano. Las lesiones de cadera y las distensiones musculares son posibles sin causar ciática, y la ciática ciertamente se puede sentir en otros lugares además de las caderas. Este dolor nervioso es común en la zona lumbar, las nalgas, los muslos, la parte posterior de las rodillas y las pantorrillas, incluso a veces hasta los tobillos. Incluso si el dolor no se siente en la cadera, sin embargo, puede ser un músculo de la cadera el que causa el problema; tal dolor se siente a menudo en otros lugares además de donde el nervio está siendo pellizcado.
Cuando los dos coinciden, el nervio pellizcado o comprimido, nuevamente, no está necesariamente en la cadera. Podría pellizcarse en algún lugar de la espalda baja, provocando una sensación dolorosa en la cadera o las piernas; De hecho, con bastante frecuencia, el dolor ciático es causado por la compresión del nervio ciático debido a un deslizamiento o hernia de disco en la columna. Esta compresión puede causar una sensación dolorosa en cualquier parte, desde la zona lumbar hasta los tobillos.
La falta de flexibilidad adecuada y la falta de uso regular de los músculos de la cadera pueden causar ciática y dolor de cadera. Estar sentado durante largos períodos de tiempo, por ejemplo, aumenta la probabilidad de compresión del nervio ciático en las nalgas y las caderas. Sentarse es una posición estática, lo que significa que los músculos de las caderas y la parte inferior de la espalda terminan esforzándose en la misma posición durante largos períodos de tiempo. El nervio ciático se puede pellizcar o comprimir entre los músculos tensos, causando dolor. Participar en una rutina de ejercicios regular puede ayudar a aliviar el dolor ciático, y un entrenamiento básico realizado con regularidad puede fortalecer y tonificar los músculos que sostienen la columna, evitando así condiciones como un disco deslizado.