¿Qué son los niveles bajos de histamina?

La histamina baja es un desequilibrio químico del cerebro que se produce cuando se acumula un exceso de cobre y provoca una sobreestimulación del sistema nervioso. La histamina regula la liberación de dopamina en la parte del cerebro que controla la percepción sensorial. Cuando hay muy poca histamina presente, puede inducir alucinaciones, paranoia y otros síntomas porque el cerebro no procesa los estímulos correctamente.

El cobre contiene una enzima que normalmente equilibra la cantidad de dopamina, noradrenalina y serotonina liberada por los neurotransmisores en el cerebro. Demasiado cobre en el organismo de una persona degrada la cantidad de histamina disponible, que controla el nivel de cada sustancia química dispensada. A medida que se desarrolla un nivel bajo de histamina, permite que se acumule más cobre en la sangre. Los estudios han demostrado que las personas con sangre tipo A son más propensas a acumular cobre en exceso.

El tratamiento para la histamina baja incluye habitualmente una dieta rica en proteínas. La proteína contiene un aminoácido que convierte la histidina en histamina. Los suplementos dietéticos como la vitamina C, el zinc y el magnesio eliminan el cobre del cuerpo para ayudar a llevar los niveles de histamina al rango normal. La niacina, la vitamina B12 y el ácido fólico también ayudan a regular los niveles químicos del cerebro.

Aquellos que sufren de histamina baja comúnmente se quejan de bajo deseo sexual, hiperactividad y ansiedad. Este trastorno cerebral también puede provocar alucinaciones y paranoia porque las sustancias químicas del cerebro están distorsionadas. La enfermedad bipolar y el trastorno maníaco-depresivo también se han relacionado con niveles bajos de histamina. Algunos pacientes con la afección tienen una tolerancia al dolor anormalmente alta. Los cambios hormonales después del parto también pueden producir un exceso de cobre y contribuir a la depresión posparto.

Los síntomas físicos de la histamina baja incluyen exceso de vello facial y corporal y presión arterial alta. Se pueden desarrollar úlceras bucales, junto con diversas alergias alimentarias. La histamina baja también puede inducir depresión y pensamientos suicidas.

Un nivel de histamina demasiado alto se llama histadelia. La histadelia envía neurotransmisores a toda marcha con un exceso de dopamina, serotonina y norefina que se libera en el torrente sanguíneo. Las personas con este trastorno suelen estar llenas de energía y deseosas de triunfar. Pueden ser personas de alto rendimiento compulsivo que sufren de insomnio y exhiben una baja tolerancia al dolor. La histadelia puede aumentar el deseo sexual y provocar adicciones sexuales.

También puede producir calor corporal extra que produce sudoración frecuente. En algunos pacientes, las orejas, los pies, la nariz y las manos pueden agrandarse para dispersar el calor corporal adicional. A menudo, el segundo dedo del pie es más largo que el dedo gordo del pie en personas con esta afección. Las personas con altos niveles de histamina pueden producir muy poco vello corporal y facial.