El inmunomarcaje es una técnica de laboratorio que se utiliza para identificar antígenos de interés en una muestra de tejido. Esto puede ser útil tanto para el diagnóstico como para la investigación, donde el inmunomarcaje puede desempeñar un papel importante en ensayos clínicos, estudios epidemiológicos y evaluación de trastornos específicos. Las muestras debidamente etiquetadas se pueden examinar bajo un microscopio para recopilar y registrar información que pueda ser relevante para el trabajo de un científico o un diagnóstico médico. Algunos investigadores realizan su propio inmunomarcaje, mientras que otros pueden delegarlo en técnicos de laboratorio o contratarlo a un servicio.
El primer paso en el proceso de inmunomarcaje es la preparación de la muestra para abordar las preocupaciones sobre posibles contaminantes y otros problemas. Se fija apropiadamente en un medio adecuado para el tipo de material bajo evaluación para que un técnico pueda pasar al siguiente paso, agregando un anticuerpo que se unirá al antígeno de interés. Esto requiere saber qué antígeno es el objetivo y seleccionar un anticuerpo adecuadamente reactivo; Los proveedores científicos venden kits de inmunomarcaje con anticuerpos de uso común y también es posible solicitar productos personalizados para proyectos particulares.
Los técnicos siguen este paso con la adición de un segundo anticuerpo unido a una etiqueta. La naturaleza de la etiqueta puede variar; puede estar diseñado para emitir fluorescencia bajo cierta luz, o podría estar hecho de un material que será recogido en un microscopio electrónico de barrido, por ejemplo. Estos se unen a los anticuerpos presentes en la muestra y los resaltarán cuando el técnico observe la muestra bajo un microscopio. Usando cámaras diseñadas específicamente para su uso en microscopía, el técnico puede tomar fotografías para registrar los hallazgos.
Este método de laboratorio sigue un protocolo muy preciso establecido por la instalación para garantizar la consistencia y confiabilidad en los resultados. Los técnicos e investigadores siguen un manual de laboratorio que dicta los tipos de fijadores y lavados que deben usarse y cómo preparar las muestras. Esto significa que si se repite una prueba, los resultados deben ser los mismos, ya que variables como un fijador diferente no influirían en los resultados; esto puede ser importante para la validez en la investigación científica. Cuando se utiliza el inmunomarcaje en la investigación, el proceso se analiza en detalle en las publicaciones científicas para que otros investigadores puedan verificar de forma independiente los hallazgos.
Como herramienta de investigación, el inmunomarcaje puede ayudar a los científicos a hacer cosas como rastrear el movimiento de los medicamentos a través del tejido, comprender cómo las enfermedades infecciosas atacan órganos específicos y monitorear las respuestas inmunes a los alérgenos. Esto les permite desarrollar nuevos enfoques para el tratamiento y manejo de enfermedades, además de brindar información más general que puede ser útil en la investigación en curso. Para aquellos que estén interesados, las imágenes de inmunomarcaje están disponibles a través de publicaciones científicas; Las etiquetas fluorescentes pueden revelar patrones particularmente llamativos e interesantes en muestras de laboratorio.