La banda de la arteria pulmonar (PAB) es un método quirúrgico para tratar defectos cardíacos congénitos específicos. Por lo general, se usa como una medida temporal para tratar a recién nacidos y bebés por sobrecirculación pulmonar. Su propósito es reducir la circulación en la arteria el tiempo suficiente para que el niño crezca, se fortalezca y se haga más grande antes de tener que someterse a una cirugía cardíaca mayor. También se usa para retardar la progresión de la insuficiencia cardíaca congestiva.
El uso de bandas de arterias pulmonares ha disminuido; sin embargo, sigue siendo un método paliativo preferido cuando la cirugía inmediata no es una opción. En algunos casos, los pacientes se colocan en ventiladores mecánicos junto con el procedimiento para reducir o prevenir el edema pulmonar. Las bandas no deben usarse como cura, sino que deben considerarse como una sujeción temporal hasta que sea posible una cura quirúrgica.
La banda de la arteria pulmonar coloca un material en forma de banda alrededor de la arteria, reduciendo su tamaño. Esta reducción de tamaño ralentiza la cantidad de sangre que fluye a través de la arteria. Cuando la sangre se desborda o fluye con demasiada fuerza a través de una arteria, puede causar problemas con la presión arterial, la frecuencia cardíaca o la estabilidad de la pared arterial. Las bandas ralentizan el flujo a una cantidad y velocidad aceptables.
Este procedimiento no se puede utilizar con pacientes cuyas arterias auriculares no funcionan bien juntas por una variedad de razones. La mayoría de los pacientes son pediátricos y tienen sobrecirculación y derivación de izquierda a derecha, o son pacientes pediátricos con transposición de grandes arterias (reversión). En el caso de la transposición, las bandas se utilizan para comenzar a entrenar el ventrículo izquierdo antes de que se realice una cirugía de cambio arterial.
En la mayoría de los casos, la banda de la arteria pulmonar se deja en su lugar durante unas pocas semanas a unos meses, después de lo cual se realiza la cirugía correctiva. Mientras espera para programar una cirugía correctiva, los trabajadores médicos brindan tratamiento para cualquier infección, controlan el peso del paciente y registran los signos vitales. La cirugía la realiza un cirujano pediatra.
Los pacientes con defectos de un solo ventrículo tienen un mayor riesgo de desarrollar complicaciones por la colocación de bandas. Este riesgo aumenta si también hay lesiones aórticas. La hipertrofia ventricular puede resultar de la colocación de bandas pulmonares en estos casos, por lo que los cirujanos pediátricos deben proceder con precaución al realizar la colocación de bandas. En muchos de estos casos, no se realiza la colocación de bandas y se adelanta la fecha de la cirugía.