Un desfibrilador es una máquina que se utiliza para electrocutar el corazón de la víctima y restaurar los patrones rítmicos normales del corazón. Cuando se usa esta máquina, en efecto, hace que el corazón entre en acción nuevamente, lo que hace que reanude el bombeo de sangre por todo el cuerpo.
Según la Asociación Estadounidense del Corazón, 700 estadounidenses mueren todos los días como resultado de un paro cardíaco repentino (PCS). Algunas personas confunden el PCS con un ataque cardíaco, pero de ninguna manera son lo mismo. Con un ataque cardíaco, causado por el bloqueo de las arterias, la víctima siente fuertes dolores en el pecho pero casi siempre permanece consciente; sin embargo, las víctimas de SCA siempre perderán el conocimiento. Los investigadores afirman que el PCS es el resultado de una «fibrilación ventricular», un temblor del corazón que evita que el músculo cardíaco bombee sangre al cuerpo. Para superar esta condición, la víctima necesitará varias formas de ayuda para sobrevivir, la más importante de las cuales puede ser la asistencia de un desfibrilador. Cada minuto que pasa sin desfibrilación disminuye las posibilidades de supervivencia de la víctima en un 10%.
Las que se utilizan en los hospitales son máquinas caras que envían voltaje a través de dos paletas que un profesional médico coloca en el área del pecho de la víctima de un ataque cardíaco. Los desfibriladores externos automáticos (DEA) se han convertido en la norma en escuelas, gimnasios, oficinas de la ciudad e instalaciones de entrenamiento. Un DEA es un dispositivo compacto contenido en una caja aproximadamente del tamaño de la lonchera de un niño.
Estas valiosas herramientas están automatizadas y ofrecen asistencia de voz para ayudar a un voluntario a usarlas con éxito. Dos almohadillas conectadas a los cables son las herramientas principales contenidas en el DEA. Una de estas almohadillas se colocará sobre el área del corazón de la víctima y la otra cerca del pecho. Una vez que todos se hayan alejado de la víctima y las almohadillas y el cableado estén correctamente configurados, el DEA se cargará solo y luego enviará voltaje al corazón de la víctima. Luego, la máquina verificará los ritmos cardíacos para determinar si se debe enviar una segunda descarga. Aunque estas máquinas guían al usuario a través de los pasos, aún se recomienda la capacitación en la administración de DEA.
La Asociación Estadounidense del Corazón afirma que se necesitan 4 pasos para salvar a alguien que ha experimentado un paro cardíaco repentino:
Comuníquese con el 911 para obtener acceso temprano a la atención médica. Reanimación cardiopulmonar (RCP) temprana para que el oxígeno llegue al corazón y cerebro de la víctima. Desfibrilación temprana para recuperar los ritmos cardíacos normales de la víctima. Atención avanzada avanzada por personal capacitado.