¿Qué implica el tratamiento de la neutropenia en los niños?

El manejo de la neutropenia en los niños varía según la causa de esta afección. Si este problema médico es causado por medicamentos, entonces se suspenderá el uso de los medicamentos o se reducirá la dosis para ver si esto produce un impacto positivo en la neutropenia. Cuando la neutropenia es causada por una infección grave, que suele durar un período prolongado, se administrarán antibióticos o medicamentos para controlar los síntomas y permitir que el paciente se recupere más rápidamente. Para la neutropenia grave, generalmente causada por una falla en la producción de neutrófilos en la médula ósea, el tratamiento consiste en factores estimulantes de colonias de granulocitos (G-CSF) para aumentar la síntesis de neutrófilos. Cuando una respuesta autoinmune contra los neutrófilos causa neutropenia en los niños, el tratamiento consiste en inhibir el sistema inmunológico mediante el uso de esteroides.

Muchos medicamentos de quimioterapia pueden frenar la actividad de la médula ósea y disminuir la producción de neutrófilos, lo que conduce a la neutropenia. El tratamiento más común para esta causa es disminuir o extender los tratamientos con medicamentos o, si es posible, suspender por completo el uso del medicamento hasta que se resuelva la neutropenia. Cuando esto no sea posible, los niños a menudo serán hospitalizados para minimizar el riesgo de infección, se los observará de cerca para detectar cualquier signo de infección y se los tratará con antibióticos profilácticos. Los padres de niños que padecen este tipo de neutropenia deben recibir una lista de signos de advertencia de infección o signos de que la neutropenia está empeorando y vigilar a su hijo con atención.

Las infecciones prolongadas o graves, especialmente en bebés y niños, pueden debilitar el cuerpo y reducir sus neutrófilos, causando neutropenia en los niños. Cuando este sea el caso, el niño será tratado con antibióticos fuertes para acelerar la destrucción del invasor extraño. También se pueden recetar medicamentos para reducir los síntomas y permitir que el niño descanse lo suficiente para reconstruir el cuerpo. Cuando la neutropenia en los niños es realmente grave, se puede hospitalizar al niño para que se le puedan administrar antibióticos por vía intravenosa y se pueda observar de cerca el estado del niño.

La neutropenia infantil, causada por un defecto en la síntesis de neutrófilos, se trata iniciando el tratamiento con G-CFS. Los G-CFS son hormonas sintéticas que impulsan la producción de neutrófilos en la médula ósea. Este tratamiento se administra, generalmente una vez al día, mediante una inyección intravenosa. La neutropenia en los niños causada por una respuesta autoinmune que destruye los neutrófilos generalmente se trata con esteroides. Estos medicamentos inhiben el sistema inmunológico y permiten que el cuerpo reconstruya la concentración de neutrófilos.

Los síntomas de la neutropenia en los niños a menudo son difíciles de leer. Cuando un niño ha sido tratado con medicamentos de quimioterapia u otros medicamentos que se sabe que causan neutropenia, los padres deben estar atentos a cualquier signo de infección. Si se nota alguno, se debe llamar inmediatamente al pediatra u oncólogo. El signo más común de neutropenia en los niños es enfermarse con frecuencia y con mayor gravedad. Algunos niños también pueden tener encías hinchadas o sangrantes.