¿Cuáles son los diferentes tipos de cirugía reconstructiva?

Una cirugía reconstructiva es un procedimiento que intenta restaurar una parte del cuerpo a su apariencia original o funcionalidad estándar. Por ejemplo, las sobrevivientes de cáncer de mama que se sometieron a una mastectomía o lumpectomía a veces optan por reconstruir sus senos. Las personas con cicatrices pueden reducirlas o eliminarlas virtualmente con otro tipo de cirugía reconstructiva. Además de ser a veces de naturaleza parcialmente cosmética, las cirugías reconstructivas del labio leporino y de la mano a menudo tienen como objetivo mejorar la funcionalidad de la boca y la mano, respectivamente.

La reconstrucción mamaria es una cirugía plástica que se realiza debido a un traumatismo en el pecho o una extirpación parcial debido a un cáncer de mama. Este tipo de cirugía reconstructiva normalmente deja una cicatriz, pero el cirujano suele intentar hacer la incisión en un lugar discreto. Es posible que un seno reconstruido no se sienta o no se vea exactamente igual que un seno natural, pero generalmente están cerca. Esta cirugía no es lo mismo que un aumento de senos, un levantamiento de senos o una reducción de senos.

La cirugía de cicatrices es un tipo de cirugía reconstructiva que puede reducir o casi eliminar la apariencia de una cicatriz. Esto implica quitar la piel con cicatrices y coser la piel restante. Aunque la cirugía no elimina por completo las cicatrices, el objetivo es minimizar su apariencia tanto como sea posible. En general, se recomienda que la cirugía de revisión de cicatrices no se lleve a cabo hasta que la cicatriz tenga al menos un año porque el cuerpo aún podría estar cicatrizando. El resultado de la cirugía puede verse afectado negativamente a largo plazo si la herida aún está cicatrizando.

La cirugía reconstructiva se usa cada vez con más frecuencia para corregir defectos de nacimiento como el labio leporino. Este defecto congénito en particular, también conocido como queilosquisis, es muy común y se cree que es genético. Ocurre cuando el labio superior no se forma completamente en el útero, dejando al bebé con un espacio facial anormal. Una gran brecha puede obstaculizar la capacidad de una persona para comer, beber y hablar. Dependiendo de la gravedad del labio leporino, la cirugía puede corregir el defecto congénito con cicatrices mínimas o nulas más adelante en la vida.

En ocasiones, la cirugía es una opción para reparar las manos dañadas por determinadas afecciones. Por ejemplo, la cirugía del túnel carpiano puede eliminar la presión sobre un nervio que causa entumecimiento y dolor. La artritis reumatoide, una afección que puede provocar una inflamación grave y la deformación de las articulaciones de las manos, a veces se puede tratar mediante cirugía. Además, la contractura de Dupuytren, una afección que implica el acortamiento de los tendones de la mano y el desarrollo de tejido cicatricial, se puede tratar mediante cirugía eliminando el tejido cicatricial y alargando los tendones.