¿Qué es la Terapia Narrativa?

La terapia narrativa es una técnica de psicoterapia creada por los terapeutas David Epston y Michael White. Utiliza algunas ideas posmodernas sobre cómo las historias pueden interpretarse de manera compleja y cómo los significados o lecturas de ellas pueden cambiar para ayudar a las personas a llegar a un yo más auténtico a través de la exploración de narrativas personales. En otras palabras, las personas tienden a contarse a sí mismas historias sobre sus vidas, pero las interpretaciones pueden verse severamente limitadas con el tiempo, lo que lleva a ideas bastante negativas o incompletas sobre uno mismo. Al explorar estas historias a través de la lente de lo que las personas desean ser en lugar de a través de interpretaciones limitadas, o al abrir estas historias para un escrutinio mucho mayor, la forma en que las personas se sienten sobre sí mismas y sus vidas puede cambiar en una dirección positiva.

Uno de los conceptos clave en la terapia narrativa es que la recopilación e interpretación de sus historias por parte de una persona es análoga a la identidad de esa persona. La forma en que las personas interpretan sus narrativas afecta directamente la forma en que se ven a sí mismos. La historia y la identidad están entrelazadas y, para cambiar la identidad, también debe cambiar la forma en que se lee o se evalúa la historia.

La mayoría de las personas tienen lo que se denomina historias saturadas de problemas, y estas suelen dar forma a la identidad y se vuelven preeminentes en la mente de la persona. Este tipo de historias tienden a ser tan grandes que reemplazan o ignoran otras partes de la narrativa de una persona que podrían contar una historia diferente o cambiar la interpretación de la vida y de uno mismo. También tienden a dar a las personas una visión en blanco y negro de sí mismos en lugar de permitir la idea de que existen múltiples interpretaciones contradictorias al mismo tiempo.

Una explicación muy simple de los objetivos de la terapia narrativa, entonces, es encontrar estas historias saturadas de problemas y comenzar a probarlas mientras se buscan otras narrativas que podrían ser contradictorias pero que han sido por las historias saturadas de problemas. Esto se puede lograr a través de conversaciones entre el terapeuta y el cliente, o de otras formas, como involucrar a un tercero para que participe en una sesión sobre una historia específica de la que él o ella tenga conocimiento personal. Esta técnica no siempre se emplea, pero terceros pueden brindar diferentes perspectivas a la visión del cliente de un evento específico o una serie de eventos que conforman una narrativa y una autointerpretación.

La terapia narrativa se llama posmoderna porque continuamente postula que hay lecturas complejas y múltiples de una historia. Las narrativas meten a la gente en problemas cuando la gente forma lecturas estrechas que limitan el yo. A medida que las interpretaciones se vuelven más abiertas, el yo se libera de la esclavitud de puntos de vista limitados. Una vista de múltiples perspectivas ayuda a las personas a crear nuevas historias sobre sí mismas que son mucho más auténticas y verdaderas para la narrativa de toda una vida.

Dependiendo de la ubicación, las personas pueden encontrar algunos practicantes de terapia narrativa cerca. Desde que comenzó la terapia en Australia y Nueva Zelanda a fines del siglo XX, el interés en ella se ha extendido a muchas áreas. Aún así, esta forma de terapia no se practica ampliamente en muchas regiones.