¿Qué es un cabestrillo pubovaginal?

Un cabestrillo pubovaginal es un procedimiento quirúrgico que ayuda a corregir los problemas de incontinencia urinaria en las mujeres. La cirugía se realiza cuando los medicamentos y los tratamientos físicos menos invasivos no logran aliviar los síntomas. Básicamente, el procedimiento consiste en injertar una lámina de tejido biótico o sintético en el extremo inferior de la vejiga, lo que proporciona un soporte adicional a la base de la uretra. Los procedimientos de cabestrillo pubovaginal tienen una tasa de éxito muy alta y la mayoría de las mujeres experimentan una recuperación completa en aproximadamente un mes.

La incontinencia urinaria de esfuerzo es un problema muy común entre las mujeres mayores cuyos músculos uretrales se han debilitado con la edad. Las mujeres que han dado a luz o que realizan una actividad física intensa también corren el riesgo de desarrollar problemas de incontinencia. Las fugas accidentales generalmente ocurren cuando hay un exceso de presión dentro del abdomen, como durante un ataque de tos, risa o estornudo. Una mujer que experimenta incontinencia de esfuerzo debe ser evaluada por su ginecólogo para conocer los beneficios de un cabestrillo pubovaginal y otras medidas de tratamiento.

Cuando un médico decide que un cabestrillo pubovaginal es la mejor opción, le explicará el procedimiento en detalle al paciente. Dependiendo de la salud general y la edad del paciente, puede ser candidata para un cabestrillo autólogo, cadavérico o sintético. Un cabestrillo autólogo está hecho de tejido fascial que se extrae de los músculos abdominales inferiores del paciente mediante una cirugía invasiva. Los cabestrillos de cadáver provienen de tejido donante y los cabestrillos sintéticos están compuestos de material de malla.

Una vez que se extrae y prepara el tejido fascial, puede comenzar el procedimiento de cabestrillo pubovaginal. Por lo general, a la paciente se le administra anestesia general y se la coloca boca arriba. Se hace una pequeña incisión justo por encima del hueso púbico para que el cirujano tenga acceso al cuello de la vejiga. El cabestrillo se inserta en la vagina y se coloca debajo de la uretra y el cuello de la vejiga. Luego, el cirujano manipula pequeños instrumentos para suturar los dos extremos del cabestrillo al tejido abdominal inferior a cada lado de la vejiga.

Un cabestrillo colocado correctamente proporciona soporte al cuello de la vejiga de manera similar a una hamaca. Cuando la presión de toser o correr empuja la vejiga y la uretra hacia abajo, el cabestrillo pubovaginal proporciona resistencia. Mantiene la abertura uretral apretada bajo presión y evita la pérdida de orina.

Una mujer puede esperar pasar de dos a tres días en el hospital después del procedimiento para que los médicos puedan monitorear la recuperación y tratar las heridas quirúrgicas. Una vez que se le permite irse a casa, generalmente se le indica que evite la actividad física durante varios días y regrese para un chequeo en aproximadamente una semana. Un procedimiento exitoso se cura rápidamente y un paciente puede volver a sus niveles de actividad normales en un mes en promedio.