Una bomba de transporte aéreo es un aparato que no tiene contacto mecánico con el fluido sobre el que se actúa. Estos dispositivos suelen utilizar un soplador o un compresor para bombear ráfagas de aire a un tubo que está sumergido en un líquido. El aire vuelve a subir a través de la tubería, lo que empuja parte del líquido hacia arriba y crea una succión en el extremo de entrada. Una bomba de transporte aéreo puede ser útil en cualquier situación en la que el líquido sea cáustico o esté mezclado con un abrasivo que podría dañar una bomba convencional. Algunos usos comunes de una bomba de transporte aéreo son en un pozo arenoso o para operaciones de dragado, los cuales pueden involucrar agua mezclada con un material abrasivo potencialmente dañino.
Dos de los principios que permiten el funcionamiento de las bombas de transporte aéreo son la flotabilidad y la presión del fluido. Cuando se sumerge una tubería y se bombea aire en ella, la flotabilidad puede hacer que el aire más ligero empuje parte del líquido hacia la tubería. Esto crea presión de líquido, que puede atraer más líquido a través de la entrada. Una bomba de transporte aéreo típica inyectará aire en ráfagas cortas, lo que permite que se forme presión de fluido pero no llena completamente la tubería con aire. Si la tubería en un aparato de transporte aéreo no mantiene columnas alternas de aire y líquido, la succión fallará típicamente y es posible que sea necesario reiniciar el dispositivo.
Un uso común de las bombas de transporte aéreo es en pozos de agua. El agua estará contenida en un sustrato de arena en algunos casos, lo que puede dificultar su extracción con una bomba tradicional. Las partículas de arena suspendidas en el agua tenderán a ensuciar las partes móviles dentro de una bomba, lo que puede provocar fallas prematuras y reparaciones costosas. Las bombas de transporte aéreo brindan una solución a esto, ya que ninguna pieza móvil entra en contacto con el agua o el material del sustrato.
En un pozo de agua de transporte aéreo típico, el aparato de tubería se extenderá bastante por debajo del nivel freático. Los diseños comunes implican extender las tuberías dos veces más por debajo de la superficie que el agua misma. Esta distancia adicional puede permitir que se acumule suficiente presión de fluido para que el agua salga del suelo.
Otro uso de una bomba de transporte aéreo es en operaciones de dragado, ya sea para despejar sedimentos o en operaciones arqueológicas náuticas. Las bombas convencionales pueden resultar contaminadas por el sedimento en las operaciones de dragado o dañar objetos de interés arqueológico. El principal beneficio de una bomba de transporte aéreo es que la bomba en sí no puede ensuciarse con abrasivos, aunque también puede ser útil porque no hay oportunidad para que una bomba raspe los materiales delicados que se levantan del lecho marino.