¿Qué es una democracia liberal?

Una democracia liberal es una forma de democracia representativa en la que los representantes electos que ostentan el poder están limitados por una constitución que enfatiza la protección de las libertades individuales, la igualdad y los derechos de los grupos minoritarios. Entre las muchas libertades que podrían protegerse se encuentran la libertad de expresión y reunión, la libertad de religión, el derecho a la propiedad privada y la privacidad, así como la igualdad ante la ley y el debido proceso en el estado de derecho. Estos derechos constitucionales, también llamados derechos liberales, están garantizados a través de varias instituciones controladas y leyes estatutarias. Además, las constituciones de la mayoría de las democracias liberales contemporáneas prohíben el mayoritarismo, que es gobernado por la voluntad de la mayoría, cuando perjudica a los de la minoría.

Representantes electos

Todas las democracias liberales son democracias representativas o gobiernos en los que los representantes son elegidos por el pueblo mediante elecciones libres y justas. Sin embargo, algunas podrían ser monarquías constitucionales o repúblicas federales en lugar de democracias plenas. En una monarquía constitucional, el jefe figurativo del gobierno a menudo está determinado por la herencia, pero los miembros de la legislatura y otros funcionarios, como un primer ministro, son elegidos por el pueblo. En una república federal, el poder del gobierno nacional es algo limitado y el poder también se divide entre los gobiernos regionales.

Sistemas de referendos

Algunas democracias liberales tienen sistemas adicionales de referendos, o votaciones públicas sobre las medidas propuestas, para dar a los ciudadanos que son elegibles para votar la posibilidad de anular las decisiones de la legislatura electa o incluso de tomar decisiones sin darle voz a la legislatura. Los sistemas políticos de otros países tienen referendos en menor grado. El uso de referendos en el sistema político de una democracia liberal podría ayudar a evitar que se convierta en una oligarquía.

Criticas

Mucha gente diría que una democracia liberal no es democrática ni liberal. Argumentarían que una democracia liberal no respeta la voluntad del pueblo excepto cuando se pide a los ciudadanos que voten por sus representantes, y que la libertad está restringida por la constitución o por los precedentes. Los críticos argumentarían que, al negar a los ciudadanos el derecho a emitir votos sobre todos los temas, especialmente asuntos serios como ir a la guerra o enmiendas constitucionales, una democracia liberal es precursora de una oligarquía o de un gobierno controlado por una élite. Otros dirían que solo una democracia liberal puede garantizar las libertades individuales de sus ciudadanos e impedir el desarrollo de una dictadura. En su opinión, un gobierno mayoritario no moderado podría conducir a la opresión de varios grupos minoritarios.