Un investigador criminal es un profesional que participa en el estudio y análisis de delitos para atrapar delincuentes y prevenir futuros delitos. Existen muchos tipos diferentes de trabajos de investigador criminal, que permiten a los investigadores privados y públicos encargados de hacer cumplir la ley adaptar sus carreras en torno a su educación personal. Los trabajos de investigador criminal pueden abarcar todas las áreas del sistema de justicia penal, desde análisis de laboratorio hasta testificar como testigo experto.
La educación puede determinar qué tipo de trabajo de investigador criminal es adecuado para un profesional. Aquellos con experiencia en biología química pueden sentirse atraídos por trabajos que les exigen analizar científicamente la evidencia. Este trabajo puede ayudar a determinar la presencia de ADN o la composición química de sustancias como drogas o explosivos. Trabajar como analista puede no sonar tan glamoroso como perseguir criminales por las calles iluminadas por la luna, pero es el paso crítico que ayuda a convertir la evidencia cruda en un caso criminal. Los trabajos de investigador criminal que se centran en el análisis forense o de laboratorio pueden estar disponibles a través de agencias policiales o empresas privadas.
Los investigadores criminales privados también pueden ser llamados detectives privados u ojos privados, y tienen la ventaja de elegir sus propios clientes y casos. Muchos brindan servicios como verificación de antecedentes, vigilancia y localización de personas desaparecidas. Aunque puede que no exista una formación académica necesaria para trabajos privados de investigación criminal, muchas regiones tienen requisitos de licencia específicos, incluidas pruebas escritas. Los investigadores privados a menudo son personal retirado de la aplicación de la ley, y muchos trabajan en estrecha colaboración con las operaciones de aplicación de la ley para realizar vigilancia y picaduras.
Un investigador de la escena del crimen visita lugares donde se cree que ocurrieron crímenes y busca detalles relevantes que puedan proporcionar evidencia. Estos profesionales a menudo tienen experiencia en justicia penal y deben tener un agudo sentido del análisis para buscar detalles importantes e ignorar los triviales. Los trabajos de investigador de la escena del crimen también requieren que un profesional siga todas las pautas legales necesarias que se refieren al manejo y examen de evidencia. Si la evidencia está contaminada, se obtiene ilegalmente o se maneja incorrectamente, el tribunal puede descartarla como inadmisible y dar como resultado la desestimación de casos importantes.
Tanto los investigadores afiliados privados como los encargados de hacer cumplir la ley pueden realizar trabajos complementarios como testigos expertos. Esto les permite actuar como consultores remunerados contratados por abogados para ofrecer una opinión profesional o brindar un testimonio basado en un análisis independiente de los datos de la escena del crimen. Los testigos expertos deben tener una larga historia de experiencia y una excelente reputación, para que el tribunal tenga debidamente en cuenta su opinión.