¿Cuál es la conexión entre la caspa y el acné?

El desarrollo de la caspa y el acné está relacionado con las glándulas sebáceas hiperactivas en la piel. También se cree que otros contribuyentes al acné, incluido el desprendimiento anormal de la piel y el crecimiento excesivo de bacterias, desempeñan un papel en el desarrollo de la caspa. Algunos de los mismos medicamentos de venta libre utilizados en el tratamiento del acné también se incluyen en los remedios contra la caspa, como el ácido salicílico. El medicamento tiende a promover la exfoliación normal de las células muertas de la piel y facilita la limpieza de los poros obstruidos.

Se cree que el exceso de grasa superficial producida por las glándulas sebáceas es el principal culpable de la caspa y el acné. Si bien la piel grasa por sí sola no es un predictor absoluto de ninguno de los trastornos, se sabe que una reducción en la cantidad de aceite producida por las glándulas de la piel ayuda a controlar ambas afecciones. El exceso de aceite en la piel y el cuero cabelludo tiende a mezclarse con las células muertas de la piel a medida que se desprenden y el material obstruye los folículos pilosos y los poros. Una vez que se tapan los poros de la piel y el cuero cabelludo, las bacterias pueden proliferar y producir las lesiones inflamadas asociadas con el acné y los copos blancos característicos que se ven en la caspa.

Uno de los otros enlaces comunes entre el acné y la caspa es el desprendimiento anormal de las células muertas de la piel. Algunos médicos e investigadores piensan que este desprendimiento anormal proviene de la inflamación y las dietas con alto índice glucémico, mientras que otros contribuyen únicamente a la genética. Lo que se sabe es que la piel arroja sus células muertas a un ritmo que es más rápido de lo normal y la capa externa de la piel tiende a desarrollar una consistencia más gruesa de lo normal. Este grosor puede dificultar que las impurezas y el aceite pasen completamente a través del poro.

La caspa y el acné también se desarrollan cuando se desarrollan cantidades excesivas de bacterias en la piel y el cuero cabelludo. En la mayoría de los casos, esta bacteria se multiplica en cantidades anormales porque las impurezas de la piel, el aceite y las células muertas de la piel quedan atrapadas en los poros durante un período prolongado. El crecimiento excesivo de levadura es a menudo el culpable de la caspa, mientras que en el acné la bacteria que causa lesiones inflamadas es P. acnes. Una de las formas de ayudar a combatir la caspa y el acné es usar productos químicos que reducen el grosor de la capa externa de la piel y promueven el desprendimiento normal de la piel.

Los remedios de venta libre para el acné y la caspa generalmente incluyen ácido salicílico, que descompone el material que obstruye los poros de la piel. El uso continuado generalmente se necesita para ver una mejora en ambos trastornos. Los medicamentos recetados para el acné y los champús y acondicionadores para la caspa pueden ser necesarios en casos moderados a severos.