¿Qué es el maíz modificado?

El maíz, también conocido como maíz, comenzó su vida como una planta de pastizales magros llamada teosinte hace unos 10,000 años. En el lapso de tiempo desde entonces, las plantas de teosinte se criaron entre sí y con otras plantas para producir la planta de maíz que conocemos hoy. A medida que cambia el consumo humano y la demanda de cultivos de cereales, surge la necesidad de diferentes plantas. Estrictamente hablando, el maíz modificado se refiere a cualquier maíz que se altera con intervención humana para producir un producto más deseable. El término típicamente se refiere al maíz que está genéticamente alterado para ser resistente a las limitaciones o amenazas ambientales, plagas y enfermedades.

Como todos los seres vivos, el maíz contiene marcadores orgánicos llamados genes. Los genes controlan las características de la planta: si es resistente a los pesticidas, qué tan grande se vuelve, qué tan resistente es y si puede defenderse o no de los depredadores. El maíz genéticamente modificado, también llamado maíz transgénico, comienza como el maíz normal. Luego, los científicos juegan con los genes de las plantas para producir rasgos más deseables.

El maíz Bt es un ejemplo de maíz modificado. El maíz Bt es un maíz normal que ha sido implantado con bacterias que se encuentran naturalmente en el suelo llamado Bacillus thuringiensis. Las proteínas cristalinas producidas por esta bacteria son tóxicas para la mayoría de las plagas naturales que afectan a las plantas de maíz. Al insertar estas proteínas en el material genético de las plantas, el maíz produce toxinas que matan a los insectos invasores que intentan destruir las plantas.

Cuando las malas hierbas se apoderan de un campo en crecimiento, absorben valiosos nutrientes del suelo. Sin el beneficio total de estos nutrientes, las plantas son menos resistentes y producen cultivos más pequeños. Algunas cepas de maíz modificado están genéticamente modificadas con resistencia contra los herbicidas químicos. Luego, los agricultores pueden rociar herbicidas en sus campos para disminuir la aparición de malezas y garantizar que su cosecha de maíz permanezca segura.

Existe preocupación por la seguridad de los cultivos genéticamente modificados. Al introducir toxinas en las plantas, los productores ponen a las personas en riesgo de sufrir reacciones alérgicas y problemas de salud. La investigación preliminar sobre los efectos del maíz modificado sugiere que la ingestión prolongada de algunas variantes puede provocar problemas renales y hepáticos.

Las preocupaciones ambientales surgen cuando las plantas genéticamente modificadas transmiten sus rasgos a las versiones de plantas silvestres o no modificadas, reduciendo así la biodiversidad. La resistencia a los pesticidas y herbicidas también son temas de preocupación cuando se trata de cultivos modificados. Debido a que las plantas son resistentes a los herbicidas, es posible que se necesiten productos químicos más grandes y más duros para matar plantas indeseables en el futuro. A medida que los insectos se acostumbran a las toxinas que se encuentran en las plantas de maíz modificadas, se pueden necesitar toxinas diferentes y más duras para matar esos insectos.