La vía P38 es una cascada de señalización celular que juega un papel en la expresión génica, el crecimiento celular y la inmunidad. La señalización permite que las células regulen una variedad de funciones y procesos en respuesta a señales ambientales e internas, coordinando la función del cuerpo. Esta vía en particular está involucrada en las respuestas al estrés ambiental y puede activarse en respuesta a la presencia de citocinas y otras proteínas en el cuerpo. Es un objetivo de investigación porque puede desempeñar un papel en la respuesta a las enfermedades.
Este proceso involucra enzimas conocidas como proteína quinasas activadas por mitógenos, que se adhieren a las proteínas para cambiar su estructura y enviar señales a otras proteínas dentro de la célula. En respuesta a presiones ambientales específicas, la vía P38 puede crear un efecto dominó cuando una serie de señales se mueven a través de una célula y producen una de las cuatro quinasas conocidas. P38 alfa es uno de los más estudiados.
Es posible que la vía P38 pueda desempeñar un papel en el desarrollo de enfermedades autoinmunes, así como asma y alergias. La vía está involucrada en la maduración de las células T y otros componentes del sistema inmunológico. La muerte celular puede regularse mediante procesos a lo largo de la vía P38, al igual que el crecimiento celular, ya que puede estar activo durante las fases clave del proceso de división y replicación de las células dentro del cuerpo humano. La investigación para seguir el desarrollo de quinasas específicas proporciona información crítica sobre cómo funcionan y dónde se pueden encontrar en el cuerpo.
Los estudios sobre la vía P38 lo han identificado como un posible objetivo farmacológico. Dado que está involucrado en las respuestas inflamatorias, es posible que los medicamentos bloqueen uno de los pasos en la cascada para prevenir la inflamación o limitar su gravedad. Esto tiene implicaciones particularmente importantes para los pacientes con enfermedades autoinmunes que experimentan inflamación crónica porque sus cuerpos se atacan a sí mismos. El bloqueo de la inflamación puede mantener a los pacientes más cómodos y prevenir complicaciones causadas por la inflamación crónica, como cicatrices y daño a los nervios.
Los investigadores interesados en esta vía de señalización celular en particular suelen trabajar para instituciones académicas, agencias gubernamentales y empresas privadas. Analizan varias etapas de la vía P38, así como las posibilidades de interrumpirla o redirigirla mediante el uso de medicamentos cuidadosamente seleccionados. Las terapias con medicamentos que se dirigen a esta vía pueden tener efectos secundarios potencialmente graves para los pacientes, otro tema de preocupación en las medidas de investigación en curso para identificar compuestos farmacéuticos para combatir la inflamación y las condiciones inmunológicas.