¿Qué es el síndrome de Couvade?

El síndrome de Couvade es un fenómeno psicológico observado en algunas parejas de mujeres embarazadas donde la pareja experimenta síntomas de embarazo. Numerosas culturas han notado la presencia de este fenómeno, incluidas las culturas humanas antiguas, y se han realizado muchas investigaciones para conocer más sobre sus orígenes. Tan pronto como la madre da a luz, el síndrome de couvade generalmente se resuelve y la pareja se siente mucho mejor, aunque en algunos casos raros las parejas desarrollan depresión posparto. La frecuencia del síndrome de couvade varía en todo el mundo y es difícil obtener estadísticas precisas, ya que se sospecha que muchos casos no se notifican.

Esta condición generalmente comienza a manifestarse hacia el final del primer trimestre. Los síntomas pueden variar, pero pueden incluir aumento de peso, náuseas, malestar físico y cambios de humor. A medida que una mujer avanza en su embarazo, los síntomas que experimenta la pareja pueden cambiar. Algunas personas incluso experimentan dolores de parto en forma de calambres abdominales y malestar mientras sus parejas dan a luz. Por lo general, el parto produce alivio y la pareja debe volver a la normalidad.

Los investigadores han notado que, en algunos casos, se pueden observar cambios hormonales en las parejas de las personas embarazadas, especialmente si las parejas son cercanas. En los hombres, la liberación de hormonas durante el embarazo se ha postulado como una forma de preparación para ayudar al hombre a prepararse para la paternidad. Las hormonas podrían explicar el síndrome de couvade, ya que muchos síntomas del embarazo están relacionados con los cambios hormonales en el cuerpo de la madre. Otros investigadores han atribuido el síndrome de couvade a motivaciones psicológicas como la culpa o el estrés.

También conocido como embarazo fantasma o simpático, el síndrome de couvade persistirá durante todo el embarazo en diversos grados de gravedad. Una vez que la madre da a luz, los síntomas deben desaparecer, excepto en los casos en los que se produce un desarrollo simpático de depresión posparto. Algunos pacientes también han desarrollado hemorragias nasales en asociación con el síndrome de couvade. Durante embarazos futuros, la afección puede repetirse y es posible experimentar un conjunto diferente de síntomas, al igual que los síntomas pueden cambiar para las mujeres entre embarazos.

El mejor tratamiento para esta afección es el control de los síntomas. Descansar, hacer ejercicio suave, llevar una dieta equilibrada y otras medidas adoptadas para aliviar los síntomas del embarazo también pueden ayudar con esta afección. A algunas parejas embarazadas les resulta útil consultar a un psicoterapeuta u otro profesional de la salud mental para hablar sobre sus temores y preocupaciones sobre el embarazo. En ocasiones, abordar los factores emocionales puede ayudar a disminuir los síntomas físicos del síndrome de couvade, además de ayudar a las personas a prepararse de manera más eficaz para el trabajo de parto, el parto y la crianza compartida.