La bradicardia asintomática es una afección en la que una persona tiene bradicardia o un latido cardíaco lento, sin ninguno de los síntomas clásicos de la bradicardia. Normalmente, los pacientes con bradicardia sufren mareos, latidos cardíacos irregulares, dolor de pecho, dificultad para respirar, fatiga y aturdimiento que ayudan a los profesionales de la salud a diagnosticar su afección. Con bardycardia asintomática, la única forma de saber que un paciente tiene la condición es midiendo su frecuencia cardíaca en reposo.
Para que un paciente sea diagnosticado con bradicardia, su frecuencia cardíaca en reposo debe medir por debajo de un cierto número de latidos por minuto. Técnicamente, una frecuencia cardíaca en reposo de menos de 60 latidos por minuto significa que un paciente puede tener bradicardia, pero si la frecuencia cardíaca en reposo del paciente no desciende por debajo de entre 55 y 50 latidos por minuto, generalmente no muestra ningún síntoma de bradicardia.
Los pacientes que son asintomáticos y tienen una frecuencia cardíaca en reposo de 55 latidos por minuto o menos por lo general nunca requieren el uso de un marcapasos. Algunos investigadores médicos incluso teorizan que la bradicardia asintomática en estos pacientes indica salud cardiovascular. Las personas que hacen ejercicio con regularidad pueden tener una frecuencia cardíaca en reposo más baja debido a un sistema cardiovascular más fuerte y eficiente, lo que requiere que el corazón bombee menos para lograr los mismos resultados.
Los riesgos de bradicardia asintomática no suelen ser tan graves como los de la bradicardia normal. Aún así, la bradicardia presenta el riesgo de que el corazón y otros órganos del cuerpo del paciente no reciban suficiente oxígeno. Los niveles insuficientes de oxígeno pueden, a su vez, provocar insuficiencia orgánica, incluido un paro cardíaco y posiblemente la muerte.
Al igual que con otras formas de bradicardia, la bradicardia asintomática puede ser causada por varias cosas. Las causas cardíacas de la afección incluyen enfermedad cardíaca vascular, enfermedad eléctrica primaria degenerativa y varios trastornos neurológicos. Las causas no cardíacas normalmente son causas secundarias de bradicardia. Algunas causas no cardíacas pueden incluir desequilibrio de electrolitos en la sangre de un paciente, abuso de narcóticos y problemas con el metabolismo del paciente.
El tratamiento de la bradicardia asintomática difiere del de la bradicardia sintomática. Dado que los pacientes asintomáticos normalmente tienen suficientes saturaciones de oxígeno en la sangre, los médicos no suelen recomendar ningún tratamiento para la afección. Es probable que el médico quiera controlar el estado del paciente de forma regular, en caso de que el estado del paciente cambie repentinamente para peor. Si un paciente asintomático comienza a experimentar síntomas de bradicardia, debe comunicarse con su médico para recibir asesoramiento y tratamiento, que podría incluir la implantación de un marcapasos para controlar la frecuencia cardíaca en reposo del paciente.