Un punto reflejo es un punto del cuerpo que se puede manipular mediante acupuntura, acupresión o masaje de reflexología para estimular las terminaciones nerviosas y apoyar funciones fisiológicas saludables. Los sistemas de puntos reflejos para reflexología y acupuntura / acupresión son generalmente diferentes. La reflexología utiliza un sistema de puntos reflejos en las manos, los pies y los oídos para estimular el sistema nervioso y apoyar la salud. La acupuntura y la acupresión generalmente utilizan los puntos reflejos identificados en la medicina tradicional china. Estos cientos de puntos reflejos normalmente se extienden por todo el cuerpo.
Si bien la reflexología y la acupuntura / acupresión suelen utilizar métodos algo diferentes, el objetivo es básicamente el mismo. Ambos sistemas terapéuticos generalmente buscan respaldar la salud de los nervios en todo el cuerpo y, por lo tanto, respaldar la salud del cuerpo en general. Los reflexólogos generalmente creen que los puntos reflejos de las manos, los pies y los oídos pueden manipularse para apoyar la salud de varios órganos y sistemas fisiológicos correspondientes. Una tabla de reflexología puede ayudar a los laicos a comprender cómo cada punto reflejo corresponde a cada órgano o área del cuerpo.
Generalmente, se considera que la acupuntura y la acupresión son básicamente la misma disciplina. Ambos sistemas terapéuticos generalmente se basan en la manipulación de puntos de presión o reflejos a lo largo de los meridianos del cuerpo. Según la medicina tradicional china, la manipulación de estos puntos de presión ayuda a mantener un flujo abundante de energía vital, o ch’i, por todo el cuerpo. Hay casi 800 puntos reflejos que se usan típicamente en acupuntura / acupresión, cada uno con su propio propósito específico, y están ubicados en todo el cuerpo. La acupuntura generalmente estimula cada punto reflejo mediante la inserción de una aguja fina, mientras que la acupresión estimula cada punto reflejo mediante un masaje con las yemas de los dedos o herramientas especializadas.
Por lo general, estos sistemas terapéuticos no se utilizan para diagnosticar afecciones médicas y, por lo general, tampoco se consideran adecuados para tratar la mayoría de las afecciones médicas. Sin embargo, pueden ofrecer beneficios para algunas afecciones médicas menores, como náuseas provocadas por el mareo por movimiento o el embarazo. Muchos sienten que la manipulación de los puntos reflejos a través de la reflexología, la acupuntura o la acupresión puede proporcionar una valiosa terapia complementaria, incluso para quienes padecen enfermedades graves.
Los estudios parecen sugerir que estos sistemas terapéuticos pueden aliviar la tensión muscular y estimular la producción de endorfinas, para controlar el estrés y aliviar el dolor. También ofrecen pruebas convincentes de que la manipulación de los puntos reflejos puede aliviar las náuseas y mejorar el estado de ánimo. Se cree que ofrecen enormes beneficios a los pacientes que sufren de dolor crónico, cáncer, depresión, ansiedad y náuseas.