¿Qué es la tuberculosis atípica?

La tuberculosis atípica es una forma de enfermedad pulmonar que se asemeja a la tuberculosis y es causada por micobacterias no tuberculosas (MNT). Estas son bacterias de la familia Mycobacterium que no son el agente casual de la tuberculosis, el complejo Mycobacterium tuberculosis o la lepra. Hay una serie de otras especies de esta familia a las que los individuos están expuestos a diario. La tuberculosis atípica generalmente afecta a personas con sistemas inmunológicos comprometidos y se observa cada vez más en mujeres posmenopáusicas. El trastorno es extremadamente difícil de diagnosticar y el tratamiento puede implicar años de terapia con múltiples antibióticos que pueden tener efectos secundarios graves.

Otro término para este trastorno es micobacterias distintas de la tuberculosis (MOTT) o micobacterias ambientales. Este grupo de bacterias es inusual por tener una pared celular gruesa compuesta de materiales que las hacen resistentes a la mayoría de los antibióticos y medidas desinfectantes. Las micobacterias generalmente pueden sobrevivir en condiciones difíciles y se encuentran en todo el ambiente en arroyos, marismas e incluso en agua clorada. Los organismos no se transmiten de un individuo a otro, sino que se adquieren del medio ambiente a través de la bebida, la respiración o el contacto con el suelo.

Los síntomas son similares a los de la tuberculosis estándar e incluyen tos, fiebre, pérdida de peso, falta de apetito, niveles bajos de energía, esputo con sangre y sudores nocturnos. De varias especies que pueden causar este trastorno, una de las más prevalentes es un grupo de especies bacterianas que se pueden encontrar en aves, como pollos. Este es el complejo Mycobacterium avium o MAC. La infección con este grupo es un efecto secundario común en pacientes con fibrosis quística o infección por VIH. No está claro por qué la incidencia de la enfermedad está aumentando en mujeres posmenopáusicas.

El diagnóstico de tuberculosis atípica implica el cultivo de las micobacterias del esputo y puede llevar de semanas a meses. En el pasado, solo unos pocos hospitales y laboratorios de investigación tenían la experiencia para identificar las especies involucradas, utilizando métodos de diagnóstico tradicionales, una vez que los microbios habían sido cultivados. Las técnicas de ADN recombinante han ampliado la capacidad de identificar especies particulares. Las diferencias de secuencia en los ácidos nucleicos son actualmente una forma común de delimitar los diferentes tipos de micobacterias.

Una identificación adecuada del tipo particular de Mycobacterium que infecta a una persona es fundamental. No todas las especies causan enfermedades. Los médicos no desean someter a los pacientes a los rigores del tratamiento innecesariamente. Los poderosos antibióticos que se utilizan para tratar las infecciones por NTM con frecuencia tienen efectos secundarios drásticos.

La resistencia a los antibióticos es muy común entre este tipo de bacterias. Las especies varían en su susceptibilidad a un antibiótico en particular. La identificación de la Mycobacterium particular que se encuentra en el pulmón de una persona permite utilizar la combinación adecuada de antibióticos en el tratamiento de la tuberculosis atípica. Por lo general, se necesita una combinación de tres a cinco antibióticos diferentes que pueden necesitarse hasta dos años para curar este trastorno.