¿Qué es una distrofia de cono?

La distrofia de los conos es un trastorno ocular que afecta a los conos, las estructuras especializadas del ojo que se utilizan para la visión de los colores. Se han identificado varias formas de distrofia de los conos y la afección parece ser de naturaleza genética. Las opciones de tratamiento se centran en ayudar a los pacientes a compensar la pérdida de agudeza visual, ya que los conos dañados no se pueden reemplazar y no es posible revertir la pérdida de visión asociada con la distrofia de conos. Los investigadores interesados ​​en la enfermedad ocular genética están trabajando para identificar los genes involucrados con el objetivo de desarrollar tratamientos más efectivos.

Algunas personas con distrofia de conos nacen con conos dañados o faltantes, y la afección permanece estática durante toda la vida. Otros experimentan daño progresivo en el ojo, con la aparición de problemas de visión al final de la adolescencia o más tarde en la vida, dependiendo de la naturaleza de la enfermedad. En estos pacientes, el ojo puede parecer físicamente normal durante un examen en las primeras etapas de la enfermedad, pero el paciente experimentará problemas de visión.

La distrofia de los conos puede causar mala visión de los colores, aumento de la sensibilidad a la luz y pérdida de la visión. Los pacientes se sentirán más cómodos en condiciones de poca luz y no podrán realizar tareas que requieran la capacidad de distinguir entre colores, especialmente cuando se trata de variaciones sutiles de color. El nivel de deterioro puede ser bastante variable y algunos pacientes también tienen otros problemas de visión. Cuando los pacientes van al médico por primera vez para recibir tratamiento, a veces puede ser difícil identificar la distrofia de los conos, a menos que el paciente mencione antecedentes familiares de la enfermedad, lo que ilustra la importancia de proporcionar historias clínicas a los proveedores de atención.

Un oftalmólogo puede examinar al paciente, determinar el nivel de daño involucrado y evaluar la agudeza visual actual del paciente. El tratamiento de la distrofia de cono puede incluir el uso de lentes ahumados o empañados para sentirse más cómodo en condiciones de mucha luz, junto con el uso de lentes correctivos para mejorar la agudeza visual. También se puede recomendar el aprendizaje de habilidades de afrontamiento para compensar la mala visión del color y la disminución de la agudeza visual para pacientes con esta afección. Las ayudas para la baja visión, como libros con letras grandes, lupas portátiles, etc., pueden ser útiles para los pacientes.

Las personas que conocen antecedentes familiares de distrofia de los conos deben someterse a exámenes oculares periódicos para controlar la salud ocular y la agudeza visual. Los exámenes regulares permitirán identificar los problemas de la vista lo antes posible, brindando a los pacientes acceso al tratamiento de manera oportuna. Es importante tener en cuenta que esta condición puede eventualmente afectar la seguridad de una persona detrás del volante, mientras opera equipo pesado y en entornos similares.