¿Cuál es la conexión entre la mialgia y la miositis?

La mialgia y la miositis, dos afecciones que afectan a los músculos, se pueden encontrar juntas en algunos pacientes. Por lo general, se los considera síntomas de un problema médico subyacente. La mialgia es un dolor muscular, mientras que la miositis es una inflamación de los músculos. Es posible que los músculos duelan sin estar inflamados y que se inflamen sin dolor, pero comúnmente ambos síntomas se observan juntos, especialmente en el caso de pacientes con problemas médicos crónicos.

Las personas pueden desarrollar dolor muscular por una amplia variedad de razones, que van desde lesiones localizadas en el músculo hasta afecciones genéticas que involucran el tejido conectivo. El dolor muscular puede ser difícil de tratar en algunos casos. Las opciones de tratamiento pueden incluir reposo, calor o hielo y medicamentos para tratar el dolor. El dolor también puede estar asociado con rigidez y debilidad en el músculo, según la causa. A veces, la causa es evidente, como en pacientes que han sufrido lesiones recientemente o que estresan sus músculos con ejercicio intenso o trabajo físico repetitivo.

La inflamación de los músculos también puede estar asociada con una variedad de afecciones, que incluyen infecciones virales, trastornos metabólicos y reacciones adversas a las vacunas. La mialgia y la miositis a menudo están relacionadas, ya que la inflamación puede hacer que un músculo se hinche y duela. En algunos casos, el músculo está débil sin ser necesariamente doloroso y la miositis ocurrirá sin mialgia.

Cuando un paciente presenta estas dos condiciones, el médico lo entrevistará y realizará un examen físico completo para conocer más sobre la situación. Se pueden recomendar pruebas médicas para recopilar información sobre el nivel general de aptitud física del paciente y la condición de los músculos. Estos síntomas pueden ser esquivos y, a veces, frustrantes. Un paciente con mialgia y miositis intermitentes puede ser especialmente difícil de tratar, ya que puede ser difícil relacionar los síntomas con causas subyacentes específicas.

Los tratamientos para la mialgia y la miositis varían, según la causa. A veces, el descanso permitirá que los músculos se recuperen de una lesión y resuelvan el problema. Otros pacientes pueden requerir medicamentos o tratamientos como la estimulación nerviosa eléctrica para interrumpir las señales de dolor que envían los músculos. Las terapias alternativas como el masaje y la acupuntura también pueden ser beneficiosas en algunos pacientes. Es posible que el dolor y la inflamación asociados con estas afecciones musculares progresen hasta un punto en el que el paciente no pueda trabajar, cuidar a los miembros de la familia y realizar otras tareas, ya sea de forma temporal o de por vida.