¿Qué es una alergia?

Una alergia es una respuesta del sistema inmunológico a una sustancia que el cuerpo percibe como dañina. Aunque la sustancia, llamada alérgeno, puede ser inofensiva, un sistema inmunológico anormal responderá al contacto, inhalación o ingestión del alérgeno como un ataque. La respuesta del cuerpo a un alérgeno, conocida como reacción alérgica, puede ser tan leve como un estornudo o tan grave como un shock del sistema potencialmente fatal. Las sustancias comunes que crean una reacción alérgica incluyen antibióticos, nueces, plantas, caspa de mascotas y veneno de insectos.

Los síntomas varían según la alergia, pero muchos se presentan como síntomas de resfriado común. Fiebre baja, estornudos, congestión nasal y dolor o picazón en la garganta pueden indicar alergias. Muchas reacciones a alérgenos químicos, como el látex o los parabenos, incluyen una erupción cutánea con bultos o picazón llamada dermatitis de contacto. Las reacciones graves deben tratarse con atención médica inmediata e incluyen hinchazón, ataques de asma o estrechamiento de las vías respiratorias.

Lo que causa una reacción alérgica es una cuestión que aún escapa a la ciencia, aunque en general se considera que ciertos factores son responsables. Muchos tipos de alergias han aumentado drásticamente desde mediados del siglo XX, lo que llevó a algunos expertos a sugerir que el aumento de la contaminación ambiental ha hecho que los sistemas inmunológicos sean más hipersensibles a los ataques. Una hipótesis sugiere que los altos estándares de higiene en el mundo moderno limitan la exposición de un niño a infecciones y alérgenos durante las fases cruciales del desarrollo, lo que aumenta la probabilidad de que el sistema inmunológico sea hipersensible.

Se desconoce por qué se desarrollarán alergias en una persona y no en otra. Algunos expertos sugieren que las alergias a menudo se heredan genéticamente, y que los gemelos idénticos son particularmente propensos a compartir los mismos problemas. A menudo, se desarrollará una reacción alérgica en la infancia, pero dado que muchas reacciones tienden a empeorar con la exposición repetida, los síntomas pueden comenzar a aparecer a cualquier edad. Por el contrario, algunas personas pueden desensibilizar gradualmente su sistema con la exposición, lo que significa que los adultos pueden superar las alergias infantiles.

La prueba de alergia puede ser un proceso complicado, especialmente si una reacción alérgica puede desencadenar afecciones potencialmente mortales. Los médicos a menudo emplean un método de prueba de parche cutáneo para una variedad de posibles reacciones alérgicas. En las pruebas cutáneas, se inyecta una pequeña dosis de un alérgeno en un parche marcado de piel para ver si la piel reacciona negativamente. Si le preocupan las reacciones graves, los médicos también pueden usar una muestra de sangre, aunque esto lleva más tiempo y puede ser menos concluyente que las pruebas cutáneas.

El tratamiento puede depender del tipo y la gravedad de la respuesta alérgica del paciente. En algunos casos leves, como los estornudos causados ​​por la caspa de animales, se les dice a los pacientes que eviten la exposición cuando sea posible y tomen un antihistamínico cuando sea necesario. Evitar el desencadenante alérgico también es clave con muchas alergias alimentarias, particularmente aquellas que pueden causar reacciones graves.

Cuando es imposible evitarlo, algunos médicos pueden recomendar inyecciones. Este tratamiento dosifica al paciente con pequeñas cantidades del alérgeno destinadas a desarrollar tolerancia en el sistema inmunológico. Las dosis generalmente comienzan en un nivel mínimo que es poco probable que provoque una respuesta y aumentan con el tiempo hasta los niveles de exposición típicos.

Las alergias son cada vez más comunes en todo el mundo, pero la mayoría son molestias menores. La fiebre del heno estacional o las alergias a las mascotas son irritantes pero inofensivas la mayor parte del tiempo; sin embargo, cualquier reacción alérgica que se desarrolle debe tratarse con cuidado. Si los síntomas parecen empeorar o incluyen asma o dificultad para respirar, algunos expertos recomiendan buscar atención médica de inmediato.