Un control de salud del caballo es parte de una buena equitación y debe realizarse diariamente y antes de trabajar con su caballo. Esto implica algunas observaciones simples que se pueden lograr durante los primeros momentos de saludar a su caballo.
Si su caballo no está en un establo, es posible que desee separarlo de su manada para obtener una evaluación precisa. Primero querrás comprobar el lenguaje corporal de tu caballo. Si tiene la cabeza gacha, podría estar durmiendo, pero también podría ser una señal de que no se siente bien. Verifique las posiciones de las piernas para ver si está levantando una pierna. Normalmente, esto es una señal de que está descansando. Si está levantando una pierna delantera, probablemente esté cojo. Si no está de pie, fíjese si está acostado cómodamente o si está agitado e inquieto.
Siguiente aviso, sus oídos y ojos. Sus oídos deben estar adelantados y alertas. Sus ojos deben ser brillantes, pacíficos y contentos. Fíjate si no mira hacia arriba cuando te acerques.
Un buen apetito es siempre un signo de un caballo sano, aunque la mayoría de los caballos comerán incluso cuando no se sientan bien. Verifique que esté ansioso por su próxima comida y si ha terminado su alimentación anterior. Revise su ingesta de agua. Todos los caballos deben beber un mínimo de cinco galones de agua por día, preferiblemente más cerca de 10 galones.
La parte más importante de su control de salud diario es el estiércol de su caballo, ya que revelará mucho sobre su estado de salud actual. Un caballo sano defeca de 10 a 12 veces al día. Si sus bolas fecales están muy secas y duras, es posible que no esté bebiendo suficiente agua. Si están sueltos, la alimentación de su caballo puede ser demasiado rica. La flojedad también puede indicar que está consumiendo demasiada sal y agua, o que tiene una irritación en su tracto digestivo. La diarrea puede ser un indicio de una infección intestinal o puede ser el resultado de los nervios. El limo o la mucosidad indican un intestino irritado. Si hay granos enteros o fibras de heno en su estiércol, esto puede significar que está comiendo demasiado rápido o que tiene algunos problemas dentales que deben abordarse. Si ve gusanos en su estiércol, es hora de que se desparasite.
Después de completar el chequeo diario de salud del caballo anterior, si tiene alguna sospecha de que su caballo no se siente bien, revise sus sonidos intestinales. El abdomen produce sonidos que indican fibra y fluidos que se mueven a través de los intestinos. Los ruidos intestinales excesivos por sí mismos no son motivo de preocupación, pero la ausencia de ellos podría indicar un problema. Los gorgoteos rápidos implican que los intestinos descomponen la comida. Los glups largos significan movimiento a través del tracto digestivo. Escuche a ambos lados en el estómago de su caballo, detrás de sus costillas y frente a su rodilla. Con la práctica, se familiarizará con lo que es normal para su caballo.
Si sus sospechas continúan, proceda revisando sus signos vitales: temperatura, pulso y frecuencia respiratoria. Una ligera variación en el control de salud de su caballo no es motivo de alarma, pero debe tenerse en cuenta. Recuerde que no siempre sentimos lo mismo los 365 días del año y no debemos esperar que nuestros caballos lo hagan. El control diario de la salud de su caballo debe convertirse en parte de su rutina normal. Es un tiempo bien empleado para asegurar la buena salud y comodidad de su caballo.