La definición de rata de manada depende en gran medida del punto de vista de cada uno. En la naturaleza, es un pequeño roedor que vive en comunidad, en nidos grandes llamados basureros, y recolecta cualquier objeto encontrado para ayudar a construir el nido. Entre los humanos, este término se usa para una persona que se queda con todo y tiene dificultades para tirar cualquier cosa.
La mayoría de las personas que se consideran ratas de manada odian tirar cosas por el temor de que puedan ser necesarias en algún momento en el futuro. Sin embargo, este tipo de comportamiento puede practicarse en extremos mayores o menores; una persona puede tener dificultades para tirar cosas pero aun así poder mantener una casa limpia y bien organizada, mientras que otra puede perder el control rápidamente. La persecución puede ser un signo de enfermedad mental y puede causar serios problemas sociales y de salud.
El principal problema para una rata de manada es qué hacer con todas las cosas que acumula. Las personas organizadas generalmente encuentran espacio para almacenar sus cosas en un solo lugar y pueden mantener la cantidad de cosas que tienen en un nivel controlado. Los acaparadores y otras personas desorganizadas generalmente almacenan las cosas por toda la casa: cualquier superficie plana y nivelada se convierte en almacenamiento, ya sea la mesa del comedor o una tabla de planchar.
Cuando el comportamiento de acaparamiento se sale de control, puede tener graves consecuencias. Los amigos y la familia pueden evitar la casa de la persona, ya que está llena de artículos; el individuo puede incluso mostrarse reacio a invitar a personas por temor a que descubran la gravedad del problema. Eventualmente, una gran cantidad de cosas puede permitir que se convierta en un caldo de cultivo para insectos y roedores, y el moho y el moho pueden crecer en los elementos enterrados que se han humedecido. Las personas que crían animales a menudo no pueden cuidarlos, lo que hace que nunca se limpien o se eliminen sus desechos.
El término «rata de carga» a menudo tiene connotaciones poco halagüeñas, y algunas personas prefieren nombres como «recolector» para evitar el estigma del acaparamiento. Idealmente, esta persona debería esforzarse por conservar solo aquellas cosas que son realmente importantes, tirar los detritos y tal vez tener una venta de garaje de vez en cuando. Algunos programas de educación comunitaria ofrecen clases de un día sobre la organización de armarios y hogares, y estas pueden ser útiles si el nivel de desorden se vuelve inmanejable.