El drenaje postural o fisioterapia torácica es un método útil para acelerar el drenaje de líquido o moco de los pulmones cuando hay una infección o enfermedad pulmonar. Implica colocar a la persona enferma en diferentes posturas durante períodos de tiempo determinados, de modo que pueda drenar el líquido de diferentes partes de los pulmones. La cantidad específica de posturas utilizadas puede variar desde tres o cuatro hasta diez, según las recomendaciones del médico. Muy a menudo, esta técnica también implica percusión (golpear el pecho con firmeza pero no demasiado fuerte con una mano curva) o vibración (sacudir el pecho durante unos segundos con la palma abierta) para ayudar a aflojar la mucosidad. Las personas pueden usar el drenaje postural en casa, ya sea sobre sí mismas, que es más difícil, o para tratar a los demás, pero necesitan instrucciones para realizarlo correctamente.
Las enfermeras, los médicos o los terapeutas respiratorios pueden instruir a las personas sobre cómo realizar el drenaje postural y la percusión o vibración cuando sea necesario. Condiciones como neumonía, bronquiolitis o enfermedades respiratorias crónicas como la fibrosis quística pueden indicar su uso. Si estas técnicas requieren un uso frecuente, es posible que se necesite algún equipo adicional en el hogar. Algunas posturas implican mantener la cabeza por debajo del resto del cuerpo, y para ello se puede emplear una mesa inclinable. Si se usa percusión, algunas personas prefieren usar dispositivos de goma, que son algo similares en apariencia a las ventosas con asas.
Como se mencionó, el número de posturas recomendadas en el drenaje postural puede variar. El drenaje completo puede involucrar hasta diez posturas para que cada área de los pulmones tenga la oportunidad de aclararse más fácilmente. Algunas de estas posiciones incluyen sentarse erguido o con la cabeza inclinada hacia adelante, acostado sobre la espalda o el estómago y acostado de lado con la cabeza debajo del pecho para que el omóplato, el pecho o la espalda estén más expuestos. Una variedad de almohadas puede ayudar a que la posición sea más cómoda. Cuando se usa la percusión, dura unos cinco minutos y se emplea en lugares específicos con cada postura. Si se utilizan las diez posiciones, esta terapia podría tardar entre 30 y 60 minutos en completarse.
Si bien muchas personas pueden encontrar útil la terapia de drenaje postural para promover la depuración pulmonar, un efecto secundario conocido es el malestar estomacal. Los niños muy pequeños a veces sienten náuseas cuando se hace esto, y las personas con episodios regulares de indigestión o reflujo ácido pueden verse significativamente afectadas. Asegurarse de que haya pasado un mínimo de una hora y media a dos horas después de una comida puede ayudar a evitar las náuseas o los vómitos. Si los síntomas del estómago no se resuelven con esta medida, se recomienda que los pacientes hablen con los médicos sobre tratamientos alternativos a la fisioterapia del tórax.