¿Cuáles son los tratamientos para el rubor?

El rubor es una respuesta involuntaria que ocurre bajo ciertas condiciones. La cara puede enrojecerse o cubrirse de manchas y manchas rojas. El rubor es una queja muy común y puede ser causa de gran ansiedad, especialmente en situaciones sociales. Muchas personas dejan de ruborizarse, pero en algunos casos extremos, es necesario un tratamiento.
El tratamiento recomendado para el rubor dependerá de la causa detrás de la afección. Esta reacción puede ocurrir como una respuesta emocional a determinadas situaciones. Si alguien se siente culpable, nervioso o avergonzado, puede aparecer un rubor en la cara y el pecho. Otros síntomas que pueden acompañar al enrojecimiento facial incluyen una sensación de calor generalizado y sudoración en las palmas de las manos o la cara.

Aparte de las consideraciones emocionales, existen otros factores que pueden provocar un rubor frecuente. Las mujeres menopáusicas pueden sufrir de rubor frecuente, a menudo denominado sofocos. También existen ciertos medicamentos y medicamentos que pueden causar la afección.

Ingerir alimentos picantes o hacer ejercicio también puede causar rubor. Cuando el cuerpo está caliente, los vasos sanguíneos se abren más en un intento de enfriar el cuerpo, permitiendo que fluya más sangre a la superficie de la piel. La fobia social también es una causa muy común de rubor intenso.

El enrojecimiento facial causado por factores psicológicos tiene varias opciones de tratamiento. La terapia cognitivo-conductual puede cambiar la forma en que las personas piensan en situaciones sociales. Los ejercicios de respiración suelen ayudar a las personas a relajarse cuando se sienten ansiosas en determinadas situaciones. Otros tratamientos incluyen colocar a los pacientes en situaciones en las que deben enfrentar y superar sus miedos.

Una de las razones más comunes de esta reacción es la ansiedad, y hay varios medicamentos disponibles que pueden usarse para tratar la ansiedad. Los betabloqueantes se usan comúnmente para tratar las palpitaciones del corazón y disminuir la ansiedad. Otro fármaco, la clonidina, actúa suprimiendo la dilatación de los vasos sanguíneos. Estos medicamentos son útiles, pero no erradican las razones subyacentes de la afección. Puede que solo sean una solución a corto plazo.

Si el enrojecimiento facial es lo suficientemente intenso, los médicos pueden recomendar un tratamiento quirúrgico llamado simpatectomía torácica endoscópica (ETS). Durante el procedimiento ETS, se cortan ciertos nervios que controlan el flujo sanguíneo a la cara. Informes recientes han demostrado que esta es una operación muy popular entre los profesionales en puestos de alto perfil. Para los profesionales que temen que el rubor frecuente arruine sus posibilidades de promoción, la solución puede ser un ETS rápido e indoloro.