El procedimiento de Burch es un procedimiento quirúrgico que se realiza para corregir la incontinencia urinaria de esfuerzo. La incontinencia urinaria de esfuerzo es más común en las mujeres y puede ocurrir después del parto. Pequeñas cantidades de orina pueden escapar de la vejiga durante las simples actividades de reír, estornudar o toser. Si la incontinencia de esfuerzo interfiere con la calidad de vida, es posible que el paciente desee considerar el procedimiento de Burch.
Varios factores de riesgo pueden provocar síntomas de incontinencia urinaria. El nacimiento de un niño a través del canal vaginal puede provocar la compresión de la uretra, el conducto que lleva la orina fuera de la vejiga. Los músculos que rodean la uretra se pueden estirar o dañar y es posible que ya no proporcionen suficiente soporte para la vejiga o la uretra. El envejecimiento, la menopausia y la falta de estrógeno también pueden provocar debilidad en estos músculos. La obesidad puede ser otro factor de riesgo que provoca demasiada presión sobre la vejiga.
Para diagnosticar la incontinencia urinaria de esfuerzo, el médico puede pedir primero al paciente que lleve un diario de los síntomas urinarios. Es posible que también sea necesario realizar estudios urodinámicos, que implican medir el flujo y la fuga de orina. Si los síntomas de la incontinencia de esfuerzo son lo suficientemente graves, el médico puede decidir realizar el procedimiento de Burch.
El procedimiento de Burch se realiza para levantar el cuello de la vejiga y estabilizar la uretra para reducir la presión de la vejiga. Reducir esta presión debería detener cualquier fuga de orina no deseada. El procedimiento se puede realizar como una cirugía abierta o como un procedimiento laparoscópico.
Se realiza un procedimiento laparoscópico de Burch mientras el paciente está bajo anestesia general. El cirujano hará de tres a cuatro pequeñas incisiones en el abdomen e insertará instrumentos quirúrgicos junto con una cámara para ver el área. Se colocarán puntos de sutura permanentes en ambos lados del cuello de la vejiga y se unirán a los ligamentos del hueso púbico. Esto debería devolver la vejiga a la posición correcta y aliviar cualquier presión.
El procedimiento laparoscópico tarda aproximadamente una hora en realizarse. Solo requiere una estadía de uno a dos días en el hospital. La recuperación y el dolor deben ser mínimos, ya que las incisiones son muy pequeñas.
El procedimiento de Burch también se puede realizar como una cirugía abierta. Esto requiere una incisión de 3 a 5 pulgadas (7.62 a 12.7 cm) en el abdomen y una estadía más prolongada en el hospital. También hay más dolor asociado con esta cirugía debido a la incisión más larga.
La recuperación en casa después del procedimiento de Burch implica limitar la actividad durante las dos primeras semanas. El paciente debe evitar cualquier actividad extenuante, levantar objetos pesados o practicar deportes durante seis semanas. Cualquier signo de infección o dificultad para orinar debe informarse a un médico.