¿Qué causa una intubación difícil?

Puede ocurrir una intubación difícil debido a anomalías anatómicas o factores situacionales como la inflamación de las vías respiratorias que dificultan el acceso seguro a la tráquea. La intubación endotraqueal es necesaria para la anestesia general y otros entornos en los que existen preocupaciones sobre la capacidad del paciente para respirar de forma independiente. Cuando la vía aérea de un paciente resulta difícil, puede aumentar el riesgo de trauma durante la intubación y también puede exponer al paciente al riesgo de baja saturación de oxígeno causada por un suministro de aire inadecuado.

Una causa común de intubación difícil es la estructura de las vías respiratorias del paciente. Si un paciente tiene anomalías en las vías respiratorias, estas podrían hacer que sea más estrecho y difícil trabajar con ellas. También puede ser difícil trabajar con los pacientes que tienen problemas para abrir la boca o extender el cuello. Si bien los pacientes suelen estar sedados o inconscientes durante la intubación, la rigidez residual y el rango de movimiento limitado pueden ser difíciles de superar.

La situación también puede ser un factor contribuyente. Si las vías respiratorias están llenas de sangre, vómito, moco u otros materiales, puede dificultar la intubación. Los médicos pueden succionar las vías respiratorias para despejarlas, pero pueden volver a llenarse rápidamente. Los pacientes con antecedentes recientes de traumatismos también pueden ser difíciles de intubar, al igual que los pacientes con restricción de las vías respiratorias causada por la inflamación. Los pacientes con asma y otras personas con inflamación crónica de las vías respiratorias también pueden presentar una intubación difícil debido a estenosis y cicatrices.

El embarazo parece aumentar la dificultad de la intubación, al igual que la enfermedad espinal subyacente. Si un paciente tiene una lesión en la médula espinal, es posible que el anestesiólogo deba tener especial cuidado para evitar sacudir y lastimar al paciente. Los pacientes con sedación inadecuada también son difíciles de intubar, ya que normalmente luchan contra la sonda y pueden ser muy agresivos. Otro factor de complicación puede ser la falta de experiencia; la única forma de aprender a manejar intubaciones difíciles es haciéndolas, pero puede ser difícil intubar sin mucha experiencia.

Los anestesiólogos pueden utilizar algunas evaluaciones para predecir el nivel de dificultad de la intubación y planificar el futuro. Pueden examinar las vías respiratorias del paciente para determinar qué tan abiertas están y para verificar si hay signos de obstrucciones y otros problemas. Si parece probable una intubación difícil y un paciente no está muy estable, el equipo de atención puede llamar a alguien con mucha experiencia para reducir el riesgo de una intubación fallida.