¿Cuáles son los diferentes tipos de tratamiento de la amiloidosis?

El tratamiento de la amiloidosis se administra para prolongar la vida del paciente y tratar los síntomas. No existe cura para la afección y el objetivo principal del tratamiento es obstruir la producción adicional de proteína amiloide en el cuerpo. Hay varios factores a considerar al decidir qué tipo de tratamiento de amiloidosis seguir, incluido el tipo de proteína amiloide, cómo está afectando al cuerpo y las áreas donde se acumula. A todos los pacientes se les recetan medicamentos y una dieta específica, pero los detalles adicionales del tratamiento, incluidos los medicamentos, los trasplantes y otros procedimientos, dependen de si la amiloidosis es AL, secundaria o familiar.

La dieta y la medicación adecuadas son partes cruciales de cualquier tipo de tratamiento de amiloidosis. La dieta, el fármaco o la combinación de fármacos específicos dependen del efecto que tenga la amiloidosis en el organismo. Por ejemplo, si el síntoma es la retención de líquidos, se puede prescribir una dieta baja en sal con un diurético. En general, se suele recomendar a los pacientes que tengan cuidado con la nutrición y que consuman comidas equilibradas de acuerdo con las pautas nutricionales generalmente aceptadas.

El tipo más común de amiloidosis es AL, también conocida como cadena ligera. Este tipo de tratamiento de la amiloidosis consiste principalmente en un trasplante de células madre o quimioterapia. El objetivo es restaurar la médula ósea que ha sido dañada o afectada por una enfermedad. El material para el trasplante puede provenir de un donante o de células sanas del paciente.

Con la amiloidosis secundaria, es necesario tratar las afecciones subyacentes que causan la tensión de la enfermedad, incluida la insuficiencia renal o cardíaca. Eso puede significar ampliar el tratamiento específico de la amiloidosis a una serie de procedimientos mucho más compleja. En su mayor parte, el tratamiento consiste en una combinación de medicamentos para tratar los síntomas.

El tipo más grave de amiloidosis se conoce comúnmente como familiar o genética. Un trasplante de hígado es el elemento principal de esta variedad de tratamiento de la amiloidosis. La introducción de un nuevo órgano sano puede ayudar a eliminar la enfermedad desde su origen. No proporciona una cura, pero puede mejorar los síntomas de manera exponencial.

La amiloidosis es una enfermedad en la que las proteínas amiloides se acumulan en el cuerpo. Las proteínas se originan principalmente en la médula ósea. Puede afectar el sistema nervioso, el hígado y los riñones. El corazón, el bazo y el tracto gastrointestinal también pueden verse afectados. Esta acumulación puede comprometer el buen funcionamiento de los órganos afectados. Aunque no existe cura, un tratamiento eficaz puede ayudar a prolongar y mejorar la calidad de vida de un paciente con la afección.