¿Qué es Zmax?

Zmax® es un antibiótico recetado que se usa para tratar varios tipos diferentes de infecciones. Viene en una suspensión oral de un solo uso que se mezcla con agua. El medicamento es eficaz contra muchas bacterias comunes, incluidas las responsables de la sinusitis, neumonía, bronquitis, infecciones del oído y algunas enfermedades de transmisión sexual. La mayoría de los pacientes que usan Zmax® ven una mejora en sus síntomas en unos pocos días, y las bacterias generalmente se erradican por completo del cuerpo en menos de una semana. Es poco probable que el medicamento cause efectos secundarios importantes cuando se usa correctamente, aunque pueden surgir malestar estomacal temporal y otros síntomas gastrointestinales.

Los antibióticos macrólidos como Zmax® funcionan interrumpiendo la síntesis de proteínas en las células bacterianas. Son capaces de atacar las bacterias del cuerpo y dejar ilesos los tejidos sanos. Zmax® evita que las bacterias prosperen y se reproduzcan, deteniendo así la propagación de una infección y matando gradualmente los patógenos existentes. El medicamento se usa comúnmente para tratar infecciones de la piel, el tracto respiratorio y los senos nasales causadas por Haemophilus influenzae, Moraxella catarrhalis, Mycoplasma pneumoniae y cepas de Staphylococcus y Streptococcus.

La dosis estándar para adultos es de 2 gramos de polvo Zmax® mezclado con aproximadamente 2 onzas (60 mililitros) de agua. Un médico o farmacéutico generalmente premezcla la solución para el paciente para evitar una dilución excesiva o insuficiente. Los pacientes pediátricos suelen necesitar dosis más pequeñas que se calculan en función de la edad, el peso y las condiciones específicas. Se aconseja a los pacientes que eviten comer, beber o tomar antiácidos u otros medicamentos durante dos horas antes y después de usar Zmax® para reducir las posibilidades de efectos secundarios e interacciones medicamentosas negativas.

Los efectos secundarios más comunes al tomar el medicamento incluyen calambres estomacales leves, diarrea y náuseas. Algunas personas se sienten mareadas o desarrollan dolores de cabeza poco después de tomar sus dosis. Las náuseas duraderas, la fiebre, los dolores en el pecho o las sensaciones de zumbido en los oídos son signos de una reacción más grave que debe notificarse a un médico. En raras ocasiones, puede producirse una reacción alérgica que provoque una erupción en la piel y la inflamación de la garganta, lo que restringe la respiración.

Las pacientes que toman Zmax® tienen un mayor riesgo de desarrollar candidiasis vaginal después del tratamiento. El antibiótico destruye muchas de las bacterias que se encuentran naturalmente en los intestinos y el tracto genital, lo que puede crear un entorno más habitable para los hongos que causan levaduras. Si aparecen síntomas de una candidiasis, un médico puede recetar medicamentos adicionales para solucionar el problema en unos pocos días.