¿Cuál es la relación entre la dexametasona y la quimioterapia?

La relación entre la dexametasona y la quimioterapia es que el medicamento se usa para tratar algunos cánceres y reducir la hinchazón asociada con otros. El medicamento también se usa para controlar los efectos secundarios asociados con la quimioterapia, como reacciones alérgicas, disminución del apetito y náuseas y vómitos. La dexametasona es un esteroide sintético y, por lo tanto, puede reducir la hinchazón asociada con los tumores cerebrales y de la columna. También puede tratar activamente el linfoma, la leucemia y el mieloma múltiple. Esto significa que la dexametasona se usa con frecuencia en los regímenes de quimioterapia.

La capacidad del fármaco para tratar el linfoma, la leucemia y el mieloma múltiple es una relación entre la dexametasona y la quimioterapia. Los médicos no saben por qué el medicamento es útil para estos cánceres, pero la investigación ha confirmado el efecto positivo. Puede funcionar cambiando la forma en que funciona el sistema inmunológico, pero esto es solo teórico. El medicamento se usa solo o como parte de regímenes de quimioterapia para estos tratamientos.

Los esteroides como la dexametasona pueden aliviar la hinchazón, lo que los hace beneficiosos para algunos cánceres. Los tumores cerebrales y de la columna vertebral tienen áreas inflamadas a su alrededor que presionan los nervios y causan dolor al paciente. La dexametasona reduce esta hinchazón al evitar que los glóbulos blancos del cuerpo viajen al área inflamada. Esto funciona para reducir la hinchazón y, por lo tanto, el dolor asociado con ella. Por lo tanto, la combinación de dexametasona y quimioterapia puede hacer que el proceso de tratamiento sea más manejable para los pacientes.

Otra razón por la que la dexametasona y la quimioterapia están relacionadas es la capacidad del fármaco para reducir los síntomas asociados con otros tratamientos. Muchos medicamentos de quimioterapia pueden causar náuseas, vómitos e incluso reducción del apetito. La dexametasona reduce la gravedad de las náuseas y los vómitos a través de un mecanismo desconocido pero verificable. Asimismo, el fármaco puede aumentar el apetito en pacientes con cáncer, pero se desconoce el motivo.

Los medicamentos comunes contra el cáncer, como paclitaxel y docetaxel, pueden causar reacciones alérgicas en algunos pacientes. La combinación de dexametasona y quimioterapia puede reducir la probabilidad y la gravedad de estos efectos secundarios. Los esteroides como la dexametasona se usan a menudo para tratar reacciones alérgicas debido a su capacidad para reducir la hinchazón y otros síntomas asociados. El riesgo de reacciones alérgicas es una pequeña preocupación en comparación con el riesgo de cáncer. Por lo tanto, es preferible el manejo de estos síntomas a no usar los medicamentos contra el cáncer más efectivos.

La investigación ha sugerido que la combinación de dexametasona y quimioterapia no siempre es la mejor opción. Los estudios han demostrado que la dexametasona administrada antes de la quimioterapia para el cáncer de mama en realidad puede tener un efecto negativo. Además, la acción de fármacos como el paclitaxel y la doxorrubicina puede ser bloqueada por la dexametasona, lo que reduce su capacidad para combatir el cáncer. Sin embargo, los médicos todavía usan el medicamento con frecuencia porque creen que sus efectos positivos superan a los negativos.