La elección del mejor tratamiento a base de hierbas para H. pylori depende de factores como las preferencias personales, los síntomas específicos y las respuestas individuales a las diversas opciones de tratamiento. Algunas de las hierbas más populares para esta afección son la canela, el brócoli y el ajo. Las frambuesas, el regaliz y el orégano también se pueden usar en el tratamiento a base de hierbas para H. pylori. Es posible que algunos medicamentos no funcionen correctamente cuando se combinan con ciertas hierbas, por lo que se debe consultar a un médico si tiene preguntas o inquietudes antes de elegir un tratamiento a base de hierbas para H. pylori.
La canela es un tratamiento a base de hierbas de uso común para H. pylori. Esta hierba puede tomarse como un suplemento oral o agregarse a recetas y se cree que es tan eficaz como muchos antibióticos recetados. Los posibles efectos secundarios de la canela incluyen disminución de los niveles de azúcar en sangre, malestar estomacal y aumento de la frecuencia cardíaca. Las mujeres embarazadas no deben tomar grandes dosis de canela debido a la posibilidad de contracciones uterinas y aborto espontáneo.
El brócoli a menudo se considera el mejor tratamiento a base de hierbas para H. pylori, especialmente cuando se consumen brotes de brócoli jóvenes. Pensado para reducir la inflamación del estómago y disminuir los riesgos de desarrollar cáncer de estómago, este alimento debe consumirse en su forma cruda siempre que sea posible para asegurar los máximos resultados. No se conocen efectos secundarios por comer brócoli, aunque el contacto con la piel puede provocar una leve irritación en algunos casos.
El ajo y las frambuesas se utilizan con frecuencia para tratar las infecciones causadas por H. pylori. Ampliamente conocido por sus propiedades antibacterianas naturales, el ajo puede ayudar a combatir cepas rebeldes de bacterias que se han vuelto inmunes a los antibióticos tradicionales. Algunas personas pueden experimentar malestar estomacal, olor corporal o reacciones alérgicas al ajo. Se cree que las frambuesas poseen propiedades antibacterianas y antivirales y son tan efectivas cuando se cocinan como cuando se comen crudas. Estas bayas se consideran seguras para la mayoría de las personas, aunque pueden contener propiedades similares al estrógeno, lo que aumenta los riesgos de ciertas formas de cáncer reproductivo.
El regaliz y el orégano se han utilizado durante siglos para tratar trastornos estomacales y pueden ser beneficiosos para quienes tienen infecciones por H. pylori. Se cree que ambas hierbas poseen propiedades antibacterianas y, a menudo, se utilizan para tratar trastornos digestivos. Los efectos secundarios del regaliz pueden incluir aumento de peso, presión arterial alta y dolor muscular. El orégano puede causar malestar estomacal, y quienes son alérgicos a otras especias, como la albahaca o la menta, pueden no ser capaces de usar este tratamiento a base de hierbas de manera segura para H. pylori.