¿Qué es un preventorio?

Un preventorio es una instalación que alguna vez se usó para aislar a personas con enfermedades transmisibles, en particular tuberculosis, en un esfuerzo por prevenir infecciones entre el público en general. Tales instalaciones fueron populares a principios del siglo XX en varias naciones, y gozaron del apoyo de gobiernos preocupados por la propagación de enfermedades infecciosas. Posteriormente se cerraron en respuesta a preocupaciones sociales y éticas, y también debido al desarrollo de tratamientos más efectivos para enfermedades que los hacían innecesarios. Algunos se mantienen como sitios históricos y es posible acceder a sus registros con fines de investigación.

La tuberculosis fue la principal preocupación de la preventoria y los sanatorios estrechamente relacionados que comenzaron a surgir a fines del siglo XIX para controlar la propagación de esta infección respiratoria altamente infecciosa. El preventorio fue designado como un espacio para aislar a los pacientes que habían estado expuestos y tenían infecciones, pero no manifestaban síntomas activos. A menudo se enviaba a los niños a esas instalaciones; aislarlos tenía la intención de proteger al público y mantener a los pacientes a salvo de aquellos con síntomas activos.

En la instalación, los pacientes recibieron atención médica y entretenimiento. Se podría ubicar un preventorio en un lugar remoto para protección adicional, lo que brindaba la ventaja de aire fresco y terrenos espaciosos para los residentes. Los pacientes jóvenes pueden tener oportunidades de educación, incluidas clases para mantenerse al día con el trabajo escolar y desarrollar habilidades. A medida que mejoraban, podían ser dados de alta, pero si desarrollaban infecciones activas, podían ser enviados a un sanatorio.

La idea de aislar a las personas enfermas no era nueva, pero el preventorio creó una estructura más organizada para identificar y prevenir enfermedades. Estas instalaciones a menudo fueron apoyadas por gobiernos y agencias de salud pública preocupadas por cómo controlar las enfermedades infecciosas, especialmente en entornos abarrotados como las ciudades. Los proveedores médicos sintieron que ofrecían ventajas para el tratamiento de los pacientes, que iban desde sacar a los pacientes de entornos insalubres hasta proporcionar un espacio para aislar a los enfermos y evitar la propagación de enfermedades.

Algunas instalaciones todavía tienen el nombre “preventorium” en su nombre y pueden enfocarse en el diagnóstico temprano y el manejo de enfermedades. Los cánceres, por ejemplo, responden mucho mejor al tratamiento cuando se detectan temprano. Un preventorio del cáncer puede ofrecer detección y diagnóstico temprano, así como pruebas genéticas para evaluar a los pacientes en busca de riesgos de cáncer. Esto ofrece oportunidades para un tratamiento rápido y temprano para limitar el daño causado por el cáncer y aumentar las posibilidades de sobrevivir sin complicaciones a largo plazo. Los pacientes no están aislados en tales instalaciones, aunque pueden ser hospitalizados para algunos tipos de atención hospitalaria.