¿Cuáles son algunos remedios caseros para las rozaduras?

El roce es una experiencia incómoda que la mayoría de las personas experimentará en algún momento de sus vidas. Si bien hay una serie de ungüentos y cremas en el mercado para ayudar a aliviar el enrojecimiento y la irritación que son parte de las rozaduras, también es posible tratar la afección con productos que se encuentran en el hogar. Mantenerse hidratado y obtener suficientes nutrientes adecuados puede ayudar a aliviar las irritaciones, y otros remedios caseros incluyen tratar el área con aloe vera, maicena o aceite de oliva y avena. Usar ropa diferente mientras el área sana también puede ayudar.

Para muchas personas, la irritación se produce debido a la pérdida excesiva de líquidos del cuerpo, como cuando se corre la temperatura durante un período prolongado de tiempo o experimenta un ataque de diarrea. Cuando este es el caso, una de las formas de ayudar a aliviar el roce es rehidratar el cuerpo. Beber más agua ayuda a restablecer el equilibrio de la piel y minimiza la sequedad que conduce a las rozaduras. Entre los remedios caseros para las rozaduras, este es uno de los más simples y fáciles de utilizar.

Además de beber mucha agua, las vitaminas también son importantes en la tarea de restablecer el equilibrio del cuerpo. El uso de suplementos que contienen nutrientes específicos, como vitamina A y vitamina C, puede ayudar a sanar las áreas irritadas. Estas vitaminas también ayudan al cuerpo a mejorar el contenido de humedad de la piel y ayudan a aliviar el dolor causado por el roce de la piel seca contra la ropa.

El aloe vera es uno de los remedios caseros para las rozaduras que muchas personas pasan por alto. Más comúnmente conocido como un tratamiento casero para las quemaduras, también proporciona un alivio natural de las rozaduras de varias maneras. Primero, el jugo de la planta se puede aplicar a la piel irritada y brindar un alivio casi instantáneo a la picazón y el enrojecimiento. En segundo lugar, el aloe vera contiene nutrientes que son potentes tratamientos de irritación que comienzan a reparar el daño en la piel. Al tener una planta a mano, las personas que sufren de rozaduras pueden romper una pequeña pieza para tratar fácilmente el problema.

La cocina contiene muchos remedios caseros naturales irritantes, incluidos algunos que pueden parecer un poco extraños al principio. La maicena es un ejemplo, y esta simple sustancia funciona tan bien como los polvos de talco comerciales. De hecho, puede funcionar mejor que el talco porque no se aglutina ni absorbe la humedad que el área infectada necesita para sanar. Al mismo tiempo, el alivio de las rozaduras que se obtiene con la maicena permite disfrutar caminando o trotando sin hacer una mueca de dolor.

Hacer una pasta simple con aceite de oliva y avena también puede ser un medicamento natural irritante eficaz para la piel. Las víctimas pueden combinar los dos ingredientes y luego esparcir la pasta generosamente sobre la piel irritada. Debe dejarse en su lugar durante 20 a 30 minutos al día. Esto se puede lograr fácilmente mientras lee un libro o mira televisión. La pasta ayudará a calmar la piel al mismo tiempo que ayuda a restaurar parte de la humedad esencial necesaria para curar las rozaduras.
También puede ayudar a las personas a ajustar su guardarropa mientras se cura la piel irritada. Deben evitar la ropa ajustada, como los jeans ajustados, que pueden empeorar el problema. Se debe usar ropa de algodón en lugar de mezclas naturales y sintéticas. Esto permitirá que el aire circule libremente y ayudará a cualquier otro tratamiento de rozaduras que se utilice.

Muchos remedios caseros para las rozaduras son tan efectivos como los productos recetados y de venta libre, mientras que son mucho más rentables. Las víctimas deben prestar atención cuando el roce haya progresado hasta un nivel en el que sea necesario el tratamiento de un profesional de la salud. Si los remedios caseros no producen resultados en unos pocos días, los pacientes deben concertar una cita con un profesional médico y utilizar métodos de tratamiento más agresivos.