La hidrocortisona es un medicamento antiinflamatorio que se presenta en tres formas principales: oral, tópica y en solución. Este medicamento se usa para tratar la inflamación asociada con diversas afecciones de la piel y las articulaciones, así como afecciones de salud más graves, como lupus, presión arterial alta y colitis ulcerosa. La hidrocortisona se puede administrar sin receta o con receta.
La hidrocortisona de venta libre viene en dosis extremadamente bajas e incluye la mayoría de los tratamientos tópicos. Las inyecciones y las formulaciones orales a menudo requieren receta médica. Los formularios de prescripción son algo más efectivos debido a sus niveles de concentración más altos y sus formulaciones combinadas con otros medicamentos para un alivio más específico.
Los tratamientos tópicos incluyen ungüentos, cremas, geles, toallas y aerosoles. A menudo se utilizan para tratar afecciones menores de la piel, que incluyen hinchazón, picazón, enrojecimiento, formación de costras, descamación y sequedad, que resultan de picaduras de insectos, bursitis, eczema y erupciones cutáneas. Las formas de espuma y supositorios se utilizan a menudo para tratar dolencias como hemorroides y problemas intestinales.
Las inyecciones de hidrocortisona se usan comúnmente para tratar la inflamación de las articulaciones y el dolor que se experimenta con afecciones como la artritis y la bursitis. Tres tipos comunes de inyecciones incluyen articular, punto gatillo y epidural. Las inyecciones articulares se realizan directamente en las articulaciones, las inyecciones en los puntos gatillo se insertan en los tendones que rodean la articulación y las inyecciones epidurales se insertan en la parte inferior de la columna. Los esteroides inhalados se utilizan con frecuencia para reducir la inflamación de los pulmones asociada con las alergias y el asma.
La hidrocortisona oral se usa para tratar una variedad de afecciones, que incluyen cáncer, afecciones de la piel y los ojos, asma y alergias. También se usa para tratar enfermedades de las glándulas suprarrenales, anemia y disfunción de la glándula tiroides. La ingestión oral de hidrocortisona generalmente se realiza con alimentos o leche para evitar dañar el revestimiento del estómago. Se debe tener cuidado al suspender este medicamento después de un uso prolongado debido a la gran posibilidad de efectos secundarios de abstinencia.
Se han observado reacciones adversas en varias situaciones, por lo que uno debe asegurarse de tener una conversación exhaustiva con un médico sobre el estado de salud. En términos generales, el uso variará de una a cuatro veces al día y durará desde unos pocos días hasta varios meses, según la afección que se esté tratando y la concentración de la receta. Existen numerosos efectos secundarios asociados con la hidrocortisona, que incluyen agrietamiento y sequedad de la piel, ardor o picazón severos, brotes de acné, erupciones cutáneas, hinchazón y dificultad para respirar. Siempre se deben informar a un profesional médico de inmediato.