La atención administrada de Medicare es un tipo de atención médica subsidiada por el gobierno que funciona como una organización para el mantenimiento de la salud (HMO). Medicare es el seguro que el gobierno brinda a las personas mayores en los Estados Unidos. Si la atención es administrada, esto generalmente significa que los pacientes deben ver a profesionales médicos dentro de un sistema en particular, deben obtener referencias para visitar a especialistas o médicos fuera de la red y tener ciertos otros límites en sus beneficios de atención médica.
Los pacientes de 65 años o más que hayan trabajado en un empleo cubierto y hayan pagado impuestos de Medicare durante al menos diez años son elegibles para calificar para este programa. Las personas discapacitadas que reciben pagos por discapacidad del Seguro Social durante al menos 24 meses también tienen derecho a cobertura. Además, las personas con enfermedades específicas, como insuficiencia renal en etapa terminal, tienen derecho a cobertura. Para los pacientes elegibles, Medicare paga algunos o todos los costos de atención médica dentro de pautas específicas.
La atención administrada es un sistema de gestión de la atención médica diseñado para reducir los costos en la industria de la atención médica. En un sistema de atención administrada de Medicare, es posible que se requiera que los pacientes visiten a ciertos profesionales médicos para que sus visitas estén cubiertas. Es posible que ciertos procedimientos médicos deban ser aprobados previamente, y los pacientes pueden estar limitados a medicamentos genéricos u otras formas de tratamiento menos costosas. En otras palabras, la atención administrada pone algunas decisiones de atención médica en manos de quienes administran el programa en lugar de estar bajo el control de médicos o pacientes.
Este tipo de plan es administrado por agencias gubernamentales o empresas privadas que trabajan por contrato. Los administradores específicos de un programa pueden variar según el estado y el plan de Medicare seleccionado por el paciente individual. La mayoría de las pautas, incluidas las limitaciones en la atención al paciente, están establecidas por las leyes nacionales de Medicare.
Las actitudes generales hacia la atención administrada están divididas. Los defensores de la atención administrada de Medicare creen que las medidas de reducción de costos desalientan el desperdicio y ahorran dinero a los contribuyentes. Otros creen que los profesionales médicos y los pacientes deberían tener total autonomía en lugar de las aseguradoras y los administradores cuyo objetivo es la contención de los costos sobre la atención al paciente. Otros más argumentan que un mayor énfasis en la atención preventiva es un mejor método de contención de costos que un sistema de atención administrada.