¿Qué es la tendinitis tibial anterior?

Un tendón es un cordón de tejido fibroso y resistente que conecta los músculos con los huesos. La tendinitis tibial anterior, también conocida como tendinopatía tibial anterior, es una afección en la que el área que conecta los músculos de la pierna, específicamente el músculo tibial anterior, con los huesos del pie en la parte anterior o frontal de la espinilla sufre una lesión. Esto puede ocurrir cuando el músculo tibial anterior está demasiado estirado o estresado.

El músculo tibial anterior es responsable de permitir que el pie se flexione o mueva los dedos hacia la pierna. Las actividades que pueden ejercer una tensión excesiva en el tendón del tibial anterior incluyen caminar, especialmente en superficies irregulares o montañosas o actividades que requieren movimientos de patadas o patrones intrincados de juego de pies con paradas frecuentes o ráfagas de movimientos. El contacto directo firme o inflexible con este tendón, como sujetar los cordones de los zapatos con demasiada fuerza o arrodillarse durante mucho tiempo, puede agravar el tendón y provocar una tendinitis tibial anterior.

Los síntomas de esta afección incluyen sensibilidad en el área del tendón y dolor experimentado con el movimiento, especialmente al señalar los dedos de los pies hacia arriba. Esta incomodidad también puede ir acompañada de hinchazón, especialmente si la irritación del tendón es causada por una lesión. El dolor puede empeorar por la noche y puede aparecer rigidez después de intentar mover el tobillo y el pie.

Los síntomas de la tendinitis tibial anterior pueden aparecer repentinamente cuando el área está lesionada. Con el uso excesivo o la tensión prolongada, el dolor y la sensibilidad pueden aparecer gradualmente o con movimientos específicos del tobillo y el pie. La inflamación inicial o el dolor repentino acompañado de hinchazón causado por esta condición, denominada fase aguda, debe tratarse con una interrupción inmediata de las actividades agravantes y un método denominado “ARROZ”: reposo, hielo, compresión y elevación.

Una vez que el proceso de inflamación ha disminuido, es necesario un programa integral de estiramiento y fortalecimiento para volver a los movimientos normales sin dolor. El estiramiento es esencial para asegurar que el tendón del tibial anterior tenga suficiente flexibilidad para funcionar correctamente. Los ejercicios de fortalecimiento del pie y el tobillo brindan apoyo y pueden ayudar a prevenir más lesiones. El entrenamiento de equilibrio y los ejercicios especializados específicos del deporte o la actividad también son beneficiosos para evitar daños o dolores adicionales asociados con la tendinitis tibial anterior.

La recuperación completa de la tendinitis tibial anterior depende de la naturaleza y gravedad de la lesión del tendón. A menudo, lleva de varias semanas a varios meses volver al máximo rendimiento atlético. Una vez que el tendón se haya curado, es importante continuar con un programa de estiramiento y fortalecimiento en el área para evitar más problemas en el área.