Aunque la belladona en homeopatía se considera bastante peligrosa cuando se toma en exceso, todavía se usa en pequeñas cantidades para tratar el nerviosismo y la inflamación. Otros usos de la belladona tratan de calmar la mente y promover un sueño profundo y reparador. Se utiliza toda la planta en el remedio homeopático, se tritura, se prensa y se extraen sus jugos en alcohol para formar una tintura. Como la belladona puede volverse venenosa si se usa en cantidades excesivas, a menudo se recomienda que se investiguen como alternativa fuentes de hierbas más seguras que brinden los mismos beneficios de relajación, especialmente cuando se trata de niños pequeños.
Desde principios del siglo XVI, la belladona, también llamada mora mora mortal, se ha utilizado para promover la belleza y la relajación. Los beneficios para el descanso fueron especialmente buscados para las personas que tenían ataques violentos y tensiones nerviosas. El efecto de la belladona se convirtió en un remedio ampliamente popularizado para promover la relajación profunda y fue utilizado por muchas personas en todo el mundo. Los usos modernos de la belladona en la homeopatía también apuntan a lograr la relajación, pero muchos médicos homeopáticos usan tinturas de belladona en cantidades más bajas para evitar el envenenamiento.
Para usar belladona en homeopatía, toda la planta debe secarse y triturarse, de modo que se extraigan todo el aceite y los jugos. Luego, estos aceites se colocan en alcohol para formar una solución diluida, que luego se convierte en una tintura. Esta tintura está en forma líquida y se puede tomar fácilmente debajo de la lengua, sin embargo, la mayoría de las personas la colocan en una bebida. Existe mucha controversia sobre este último método, porque un error puede provocar una sobredosis venenosa de belladona.
Los principales efectos secundarios de la belladona incluyen dolores de cabeza, migrañas y, en algunos casos, convulsiones extremas. La sobredosis de belladona puede provocar la muerte, por lo que es una prioridad para cualquier usuario buscar un consejo sabio y confiable sobre la hierba por parte de un médico holístico autorizado o un médico homeopático especializado. Cuando se usa belladona en homeopatía, es importante no dársela nunca a bebés, niños o madres lactantes, ya que esto puede ser increíblemente dañino incluso en cantidades normales. La mayoría de las autoridades médicas aconsejan buscar alternativas más seguras a la belladona que produzcan los mismos efectos, como el uso de melatonina para promover la relajación y reducir las tensiones nerviosas, lo que en última instancia conduce al sueño.