¿Es seguro usar nifedipina durante el embarazo?

No se conoce completamente la seguridad de tomar nifedipina durante el embarazo. Esto está clasificado como un medicamento de categoría C para el embarazo, lo que indica que hay motivos para sospechar posibles problemas de seguridad. Las pruebas con animales han demostrado un aumento en la tasa de abortos espontáneos y defectos de nacimiento después de recibir altas dosis de nifedipina. Sin embargo, los pocos estudios en humanos que se han realizado no han mostrado efectos nocivos para el feto. Una mujer puede tomar nifedipina durante el embarazo si ella y su médico creen que los beneficios superan los riesgos.

La nifedipina es un bloqueador de los canales de calcio, lo que significa que afecta la cantidad de calcio en el músculo cardíaco para relajar los vasos sanguíneos. Se usa para tratar la presión arterial alta y otras formas de enfermedad cardíaca. A veces se usa para detener el trabajo de parto prematuro, aunque en 2011 no fue aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) para este uso. Los efectos secundarios incluyen

La presión arterial alta puede estar presente antes del embarazo o ocurrir como resultado. Si ocurre durante el embarazo, puede ser un signo de preeclampsia, una afección peligrosa que puede provocar convulsiones o un derrame cerebral. La cura para la preeclampsia es el parto del bebé. Si la presión arterial alta estuvo presente antes del embarazo, el parto del bebé generalmente no tendrá un efecto sobre la afección de una forma u otra. La nifedipina durante el embarazo se puede usar para tratar la presión arterial alta independientemente de si está relacionada con el embarazo.

La hipertensión arterial no tratada durante el embarazo puede ser peligrosa tanto para la madre como para el bebé. Las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de coágulos de sangre, que pueden causar un ataque cardíaco, un derrame cerebral o una embolia pulmonar. Estos pueden ocurrir incluso más fácilmente en mujeres con presión arterial alta. La presión arterial alta aumenta el riesgo de desprendimiento de placenta, en el que la placenta se desprende prematuramente del útero y causa hemorragia y posible muerte fetal. El bebé recibe menos sangre y oxígeno cuando la madre tiene presión arterial alta, lo que puede provocar problemas de crecimiento o muerte fetal.

Es importante tratar la hipertensión arterial. Las mujeres que no deseen tomar nifedipina durante el embarazo pueden preguntar a sus médicos sobre otras opciones de tratamiento. Existen otras clases de medicamentos, como los betabloqueantes, algunos de los cuales se consideran muy seguros durante el embarazo. Dado que actúan de forma diferente a la nifedipina, es posible que no sean adecuados para todas las personas. Las modificaciones de la dieta y el ejercicio también pueden controlar la presión arterial en algunas mujeres.

Las mujeres que desean tomar nifedipina durante el embarazo pero están preocupadas por los defectos de nacimiento pueden encontrar otros métodos de tratamiento durante el primer trimestre. Una vez que se completa el primer trimestre, los riesgos de defectos congénitos se reducen significativamente. Sin embargo, los riesgos de hipertensión arterial que afectan a la madre o al bebé aumentan a medida que avanza el embarazo.