Una viga es un tipo de viga vertical interna que sostiene la carga del techo de un edificio, o el peso desde arriba, y constituye el marco de un techo. En combinación con materiales exteriores rígidos como madera contrachapada y tejas, la mayoría de estas vigas están diseñadas para doblarse ligeramente bajo el peso de fuerzas externas. Esto permite la inclinación de un techo y ayuda a resistir el peso y el deterioro gradual causado por condiciones climáticas extremas, como fuertes lluvias y nieve. Aunque generalmente está hecho de madera, una viga puede consistir en hormigón armado o acero, dependiendo de la carga del techo u otros factores. Existe una variedad de tipos para permitir muchas tareas arquitectónicas.
Las vigas se combinan típicamente con pequeñas vigas horizontales, llamadas vigas, para crear una unidad triangular conocida como viga de celosía o viga de celosía. Estas unidades estructurales suelen estar compuestas por una o más secciones triangulares cuyos extremos están conectados en cada extremo por nodos o juntas. El momento de flexión, o fuerza de flexión, de una viga se refiere a la tensión o flexión causada por cargas de peso externas y otras fuerzas. En una viga de celosía, este peso se traslada a los nodos de la unidad, que deben soportar el esfuerzo y la compresión de la carga del techo u otros factores de peso.
Cuando el peso de un techo u otras limitaciones externas se convierten en un problema, el diseño de la armadura puede permitir una carga más pesada sin preocuparse por la tensión y la compresión gravitacionales o externas. Con esta innovación, los arquitectos han llevado su uso más allá del soporte interior. A veces ayuda en la construcción de numerosas estructuras, como puentes y rascacielos, por ejemplo.
La pendiente a la que se enmarca un techo determina su inclinación o su grado de inclinación. En la estructura de los edificios, los techos pueden tener una pendiente relativamente plana que varía desde 0.394 pulgadas (1 cm) de elevación por 5.906 pulgadas (15 cm) de longitud de la viga, hasta una pendiente más pronunciada que mide más de 0.787 pulgadas (2 cm). por 0.394 pulgadas (1 cm) de longitud. Los diferentes grados de pendiente pueden ayudar a algunas estructuras a soportar elementos como la nieve y el hielo sin derrumbarse, al tiempo que permiten que los edificios en otros entornos tengan una línea de techo baja con fines arquitectónicos o estéticos.
Algunos constructores pueden optar por dejar las vigas del techo expuestas. Esta práctica ayuda a dar a los espacios más pequeños la apariencia de un área más grande, y también puede dar un aspecto más moderno y natural al interior de una estructura. Las vigas y las vigas del techo incluso pueden volverse funcionales como un lugar para cubrir tapices y otros elementos decorativos.