El calafateo se refiere al proceso de sellar un espacio entre dos superficies con el propósito de hacerlo hermético al aire o al agua. La palabra se puede usar como sustantivo (cuando se refiere a la sustancia selladora) o como verbo (cuando se refiere al acto de sellar). Hay cientos de tipos diferentes, pero los más utilizados en la reparación del hogar incluyen los hechos de látex acrílico, caucho butílico y silicona.
Masilla de látex acrílico (a veces llamada masilla de pintor): este tipo se usa principalmente como sellador alrededor de ventanas y puertas. Está disponible en una gama de colores y se puede pintar para que coincida con las superficies contiguas. Este tipo es más fácil de aplicar que la silicona y se limpia fácilmente con agua y jabón.
Masilla de caucho butílico: este tipo es el más fuerte y duradero. Su uso principal es rellenar grietas en hormigón y ladrillo, pero también se puede utilizar para sellar superficies metálicas. Aunque el caucho de butilo no viene en varios colores, se puede pintar para que combine con las superficies circundantes. La limpieza requiere el uso de un solvente.
Masilla de silicona: cuando desee tener una masilla para todo uso a mano, este es el tipo que querrá. El silicio se puede utilizar en una amplia variedad de superficies no porosas, desde metal hasta plástico. Su mejor característica es que permanece algo flexible incluso después del secado, por lo que no es propenso a agrietarse debido a las fluctuaciones de temperatura. El silicio no se puede pintar; sin embargo, está disponible en una variedad de colores.
Además de los tres tipos básicos, existen muchas variedades especializadas diseñadas para tareas específicas. Algunos de estos incluyen sellador de cocina y baño con un antimoho incorporado; masilla de mortero que aguanta altas temperaturas; sellador de techo para reparar fugas menores; sellador para canaletas y tapajuntas; y sellador de asfalto.
La masilla se ha aplicado tradicionalmente con una pistola de calafateo especial diseñada para ese propósito. Sin embargo, los fabricantes de estos productos han comenzado recientemente a ofrecer sus productos en tubos de compresión o en latas presurizadas con una punta estrecha extendida para que el aficionado al bricolaje no tenga que invertir en una pistola para un simple trabajo de reparación. La aplicación de este material es una tarea bastante sencilla, aunque puede ser necesario un poco de práctica para perfeccionar el dibujo de una cuenta uniforme. Antes de aplicar cualquier tipo, asegúrese de que todas las superficies estén limpias y secas.