¿Cómo mantengo las vigas del piso?

Las vigas del piso son los soportes horizontales que sostienen los pisos de su hogar. Una vez instalados, por lo general no requieren mucho mantenimiento a menos que se dañen o se expongan al moho. Los pisos chirriantes son otra indicación de que las vigas del piso pueden necesitar algo de atención. Si su piso se hunde, tiene un punto bajo, tiene un punto blando o se vuelve hinchable, es hora de hacer una inspección de las vigas para determinar si es necesario reemplazarlas o repararlas. En algunos casos, puede ser necesario quitar el piso y el contrapiso.

El mantenimiento de las viguetas del piso suele ser mínimo, pero si se desarrolla moho en las viguetas, es mejor abordar el problema lo antes posible. Las vigas que están en contacto directo con el suelo, el concreto u otros materiales naturalmente húmedos tienen más probabilidades de enmohecerse, al igual que las vigas del piso que están situadas cerca de las tuberías de plomería en un sótano. Para tratar este tipo de moho, puede mezclar agua y vinagre o lejía en una botella rociadora y rociar una fina niebla de la solución sobre las vigas. No empape las vigas; rocíe una fina niebla y luego límpielos. Repite el proceso hasta que desaparezca el moho.

A veces es posible inspeccionar visualmente las vigas del piso sin quitar el piso. Por lo general, esto es posible si existe un sótano o un sótano debajo del piso. Una inspección puede revelar una viga suelta, una viga agrietada o partida, o incluso un soporte deformado. Si surge alguna de estas situaciones, será necesario reparar o reemplazar la vigueta lo antes posible. En el caso de una viga suelta, es mejor buscar dónde se ha aflojado el soporte para determinar si se puede volver a asegurar. Es posible que sea necesario reemplazar una viga agrietada, pero también es posible que simplemente se refuerce con una técnica conocida como hermanamiento.

Herrar una viga implica asegurar una nueva viga recta a la vieja y agrietada. Esto se hace perforando agujeros y atornillando las dos vigas juntas. Será importante levantar el piso o la viga agrietada para asegurarse de que la nueva viga está apoyando el piso de manera que quede plano y nivelado. Esto se puede hacer usando un gato para automóvil o un gato de botella, y una pieza de madera de 4 × 4. La misma técnica se puede utilizar para una viga deformada. Si las vigas del piso están dañadas más allá de una reparación segura, será necesario reemplazarlas.